producido, a su juicio, por la “desconexión consumidor-vino”, dado que se ha “elevado tanto la ‘categoría’ del producto que asusta”. “Y el consumidor se siente abrumado”, añadió. Según el director general del Grupo Diego Zamora, se han dado mensajes complejos (añadas, cuerpo, etc.) y ahora el reto es “llegar y contactar con el consumidor”. Tratar de cambiar los hábitos de consumo y no considerar el vino “solo para momentos especiales”. El objetivo es que el consumidor esporádico pase a serlo más fre- cuente (3 veces al mes). Restoy tiene claro que hay que cambiar algunos mensajes históricos, surgidos incluso desde el propio sector. “El vino se puede tomar con hielo, en lata, en formato pequeño o tapón de rosca. Como industria, nuestro trabajo debe ser facilitar la vida del consumidor”, concluyó. Mapa Motivacional del Consumidor de Vino La directora de Contenidos de la consultora BMC Strategic Innovation presentó en primicia el trabajo de segmentación actuali- zada y granular del mercado del vino en España (Motivational Map). Un estudio que coloca al consumidor en el centro de la estrategia y analiza el comportamiento del público en relación con este producto. Se ha realizado a partir de 1.810 entrevistas que han supuesto 3.526 ocasiones de consumo. El vino representa el 20% de actos de consumo, lo que supone un 14% en porcentaje de volumen y 20% en valor. El perfil se califica como “sibarita” y encuentra como princi- pales barreras la falta de refrescamiento y el formato de la botella. El trabajo concluye invitando a buscar una visión que vaya "más allá del vino", ya que "aporta riqueza de aprendizajes y amplía el radio de acción para estrategias más relevantes y diferenciadoras". Considera también que "el consumidor está ávido de mensajes y propuestas que conecten con su estilo de vida" y destaca las "gran- des oportunidades" que ofrece "para evolucionar sus significados y roles en la vida de las personas, desde su esencia y sin complejos". Debate con representantes de la cadena de valor Un viticultor, una enóloga, un gestor de bodega, un restaurador y un representante de la distribución protagonizaron el debate sobre los retos que debe afrontar el sector vitivinícola. A ellos se unió, repre- sentando el papel del consumidor, el presentador de la jornada, el humorista Carlos Latre. La aproximación al consumidor volvió a situarse en el centro de las intervenciones. Precio, color, variedad, Denominación de Origen... pueden ser argumentos utilizados a la hora de elegir el vino, señaló la enóloga Almudena Alberca, directora técnica de Bodegas Viña Mayor (Grupo Bodegas Palacio 1894) y primera mujer española Master Wine, pero puntualizó que hay consumidores que "tam- poco quieren tanta información, solo disfrutar del producto". “Con una copa de vino puedes recorrer todo el territorio nacional y cada uno refleja la personalidad de su zona”, agregó el viticultor navarro David Palacios, presidente de la DO Navarra y de la Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas (CECRV). Muy incisivo en sus intervenciones fue Íñigo Pérez 'Urrechu', propie- tario de varios restaurantes. “El mundo del vino es como el perfume: cambias según el estado de ánimo”. Este chef destacó que usa el vino en la cocina “para darle al comensal un punto más”. Juan Vázquez, viticultor y director general de Bodegas Martín Códax, fijó la vista 55 MERCADO El humorista y presentador Carlos Latre condujo la jornada. en los jóvenes como público al que también deben intentar captar. "No hay que intentar entender a los millenials, hay que rodearse de ellos y escucharles". En esta línea se expresó tambien el director general de la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas). "Hemos perdido al consumidor joven. Nos sentimos orgullosos de exportar, pero no de vender en España", lamentó. Para concluir, los protagonistas abogaron por la unión del sector para comunicar con el consumidor y atender a sus necesidades. El presidente de OIVE, Ángel Villafranca, avanzó la hoja de ruta de la organización y subrayó que “el vino de España debe dar una imagen fuerte y de país”, al que los consumidores deben sentir más cerca, para lo cual es necesaria la innovación.•