Antimicrobianos naturales de canela y tomillo Investigadores de la Universitat Politècnica de València (UPV) y del Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA), centro del CSIC, han estudiado la efectividad de nuevos sistemas antimicrobianos basados en el uso de aceites esenciales extraídos de plantas como el tomillo o la canela para mejorar la conservación de alimentos, en especial, del vino. 38 MADURACIÓN El consumidor es cada vez más exigente con los productos que ingiere. Por una parte, demanda que tengan una larga vida útil que facilite su almacenamiento doméstico durante un largo tiempo. Pero, además, prefiere que las tecnologías de conservación aplicadas para tal fin no modifiquen las propiedades nutricionales y sensoriales de los alimentos, típica de los tratamientos térmicos, ni tampoco añadan aditivos. Para abordar estas limitaciones, se requiere por tanto el desarrollo de nuevas técnicas de estabilización microbiana, en las que se incluyen nuevos agentes antimicrobianos. La novedad de este trabajo radica en la inmovilización química de los aceites esenciales sobre soportes autorizados para su uso en ali- mentos, de forma que mantienen la actividad antimicrobiana típica de los aceites esenciales sin migrar al alimento. Hasta la fecha, los han aplicado en el tratamiento de microorga- nismos alterantes del vino, y consiguieron inhibir su crecimiento. A partir de los resultados de este trabajo se están llevando a cabo nue- vas investigaciones que apuntan a que los sistemas antimicro- bianos desarrollados pueden ser usados para estabilizar microbiológicamente vinos, reduciendo así la cantidad de aditivos como los sulfitos.