Sector El presente y el futuro de la impresión 3D Desde el año 1986, en el que se patentó la primera máquina de estereolitografía, la evolución de las tecnologías de impresión 3D ha ido en constante incremento. Se han inventado nuevas técnicas de impresión 3D, como máquinas de impresión 3D para metal (titanio, aceros, cromo- cobalto), máquinas que aplican solución adhesiva sobre polvo de plástico, máquinas que usan tinta o impresoras 3D que usan azúcar o chocolate para fabricar galletas o bombones. Todas estas máquinas comparten el mismo principio: la fabricación aditiva capa a capa, usando distintos procesos de adición de material —resinas, poliamidas, metales, composites, vidrio, etc. Por esta razón el nombre técnico para la impresión 3D es ‘Tecnología de fabricación aditiva’ o ‘Additive manufacturing’. Felip Esteve, director de Aserm - Asociación Española de Rapid Manufacturing (www.aserm.net) Foto cedida por Hofmann. Todas las tecnologías de fabricación aditiva utilizan archivos estándar en formato STL o AMF que representan el objeto digitalmente, lo que permite al usuario diseñar o modificar la pieza directamente en el ordenador. Una vez configurado el objeto con la forma deseada, el software lo divide ‘capa a capa’ y el ordenador guía la impresora 3D para materializar el objeto, sumando una capa sobre otra. La impresión 3D está cambiando profundamente la naturaleza del proceso productivo dando una serie de ventajas sin prece- dentes a los creativos y a las empresas innovadoras aportando una serie de ventajas económicas, que pueden generar cambios de paradigma y modelos de negocio. 14 Algunos de los recursos y soluciones que aporta la tecnología de fabricación aditiva En primer lugar, para fabricar un objeto utilizamos sólo lo que necesitamos, lo que baja el coste de la materia prima y es favo- rable a una economía más sostenible. En una gran parte de las técnicas de impresión 3D existentes, se puede recuperar o reutilizar la materia prima para nuevos programas de fabrica- ción. Por otra parte, una ventaja fundamental para las empresas que se orientan a series cortas o diseños personalizados, la impresión 3D representa un cambio revolucionario, puesto que cualquier cambio de diseño o modificación del CAD, no implica gasto en utillajes o modificación del molde, lo que aporta mayor flexibilidad en tiempo, adaptación al cliente, y mayor ventaja respecto a la competencia. Aunque podemos destacar todas las ventajas enunciadas anteriormente, también podemos decir que los investigadores, los diseñadores y los creativos ven en esta tecnología unas posibilidades nunca antes imaginadas. Hasta hace bien poco, las restricciones tecnológicas limitaban la formas geométricas convencionales, en cambio ahora, pueden inves- tigar sobre nuevas formas que imitan la naturaleza y también incorporar interconexiones con distintos materiales o funcio- nalidades, para crear componentes de mayor valor añadido (conexiones digitales incrustadas en materiales plásticos, impre- sión de células vivas en materiales biocompatibles). Otra gran ventaja, es la que aprovechan las empresas que están sometidas a un nivel de personalización (fabricación de prótesis auditivas, coronas odontológicas, donde la forma del producto tiene que estar ajustada a cada usuario. En estos casos, la tecnología de fabricación aditiva ya ha ganado la batalla a las tecnologías convencionales. Una máquina de impresión 3D puede fabricar