2.- Los cambios de composición de sus componentes Como hemos visto, con la subida de las temperaturas las fases de muchos componentes del hormigón se alteran modificando, a veces de forma importante, sus propiedades. De todas formas, este efecto es menos importante que el anterior. Por ejemplo, las fases portlandita, etringita y calcita cambian con la temperatura a nivel micro estructural. Pero para entonces, la deshidratación del gel ha debilitado ya el hormigón a niveles irreversibles. 3.- La evaporación explosiva del agua Especialmente relevante en hormigones de alta resistencia. La desecación y deshidratación del hormigón genera vapor de agua, tanto más rápidamente cuanto mas brusco sea el aumento de la temperatura. Si la presión generada por ese vapor es superior a la velocidad de salida por los poros, puede llegar a romper las capas mas exteriores del elemento, pudiendo expo- nerse a la acción del fuego la armadura interna. Este efecto se denomina spalling, y a veces puede ser tan brusco que llega a ser explosivo. En el capítulo sobre estructuras en túneles se analiza este fenómeno con mayor amplitud. 4.- Los efectos de la temperatura en la armadura interna La disposición de las armaduras cercanas a la parte del elemento traccionada hace que sufran los efectos de la temperatura en un momento relativamente temprano. De hecho, éste es uno de los valores que el Eurocodigo 2 Parte 1-2 toma como referencia para los cálculos de resistencia al fuego, junto con el tamaño mínimo o sección. El acero de armar sufre los mismos efectos con la temperatura que el acero estruc- tural, efectos que se magnifican si este acero está pretensado, pues trabaja más cerca de su límite elástico. Si la protección del hormigón es insuficiente, o el efecto spalling le deja expuesto a la acción del calor, pierde su capacidad al igual que su homologo estructural. El colapso de la estructura está próximo. Variables del comportamiento del hormigón al fuego El comportamiento al fuego de un elemento estructural de hormigón dependerá de: • Su tamaño. Cuanto mayor sea su sección, mejor comportamiento. • El recubrimiento de la armadura. Cuanto mayor sea la dis- tancia al eje el elemento de armar, mejor comportamiento al fuego. • Porosidad. Cuanto menos poroso sea el hormigón, peor comportamiento al fuego. El hormigón tiene un buen comportamiento en caso de incendio, la presencia de agua y la baja conductividad térmica ralentizan el calentamiento de las secciones. Sin embargo, incluso para las estructuras de hormigón armado son necesarios controles de resistencia al fuego teniendo en cuenta el incremento de tem- peratura y el comportamiento de las barras de las armaduras. Los mecanismos de colapso pueden ser diferentes. En la mayoría de los casos, la pérdida de la capacidad de carga es debido a la Protección contra el fuego pérdida de resistencia de la armadura de acero, especialmente cuando, en la fase de diseño, no tuvieron en cuenta explícita- mente la acción del fuego y no está bien protegida de hormigón. El colapso del hormigón es más raro, ya que los espesores son generalmente lo suficientemente altos para permitir que las capas internas de la sección sea resistente a un calentamiento más gradual, lo que provoca la pérdida de la resistencia a la compresión se produce en el tiempo de retraso con respecto al rendimiento de la armadura. Como resultado de ello, son los elementos más vulnerables, la armadura superficial o los pilares muy delgados, los que menos se pueden beneficiar de la conductividad térmica reducida del hormigón. Métodos para la determinación de la resistencia al fuego R Desde el punto de vista reglamentario, el Código Técnico de la Edificación especifica que la resistencia al fuego de una estructura de hormigón se puede evaluar basándose en el resultado de: • Las comparaciones con las tablas. • Cálculos. Clasificación de la base de comparación con tablas: El CTE en su Documento Básico DB SI 6 ofrece tablas que pue- den ser utilizadas para la verificación de la resistencia al fuego de las estructuras de hormigón armado con respecto a vigas, pilares, paredes y techos de hormigón armado y pretensado. Clasificación en base al resultado de cálculo: El CTE especifica que la resistencia al fuego de una estructura de hormigón se puede evaluar analíticamente a través de los métodos de cálculo especificados en la Norma EN 1992-1-2: ‘Diseño de estructuras de hormigón – Parte 1-2: Reglas gene- rales – estructural contra incendios’. Los métodos de cálculo que pueden ser adoptados en pruebas de resistencia al fuego de las estructuras de hormigón en virtud de la norma arriba mencionada se pueden distinguir: • Métodos de cálculos simplificados. • Métodos de cálculos avanzados. • Métodos de cálculos que surge de la comparación con las tablas. Protección de estructuras de hormigón armado Los sistemas de protección se aplican a estructuras de hormigón armado a fin de mejorar el rendimiento de la propia estructura. La protección aislante, aplicada como un revestimiento de la superficie de los elementos estructurales, sobre la base de la relación de equivalencia entre el material protector y el hormi- gón, que se define como el “el espesor mínimo de hormigón capaz de producir el mismo efecto aislante de 1 cm de material de protección”. Los valores de la relación de equivalencia de los materiales de protección deben ser calculados usando sólo los métodos de 71