les, sino que deberá evaluar específicamente los riesgos que se deriven de los campos electromagnéticos en el lugar de trabajo. Esto implica, que no sólo bastará con demostrar el cumplimiento de los Niveles de acción (NA) o los Valores límites de exposición (VLE), que en algún caso podría ser insuficiente para proteger adecuadamente a las personas con riesgos particulares o evitar riesgos derivados de efectos indirectos, sino que se verá obligado a comprender la naturaleza de los campos presentes en el área de trabajo, analizar los equipos con los que se trabaja y realizar cálcu- los/simulaciones de áreas concretas de alto riesgo. En definitiva, el trabajo de evaluación no sólo se limitará a medir campos, sino que será necesario evaluar la naturaleza del trabajo, las ubicaciones de las personas y analizar los ciclos de trabajo. Figura 1.- Distribución del campo magnético alrededor de la bajante de un cable de potencia de un tren. Pongamos un ejemplo: supongamos que en una instalación industrial se encuentra una máquina para realizar soldaduras o calentamien- tos de piezas por inducción electromagnética. El empresario se verá obligado a medir los niveles de campos emitidos por este equipo, pero también a analizar las condiciones de trabajo de las personas en esas áreas ya que aun cumpliendo con los límites, una persona que manipule estos equipos con alguna prótesis metálica podría verse afectada generándole quemaduras. La responsabilidad del empresario no solo se limita a realizar una serie de medidas, sino que será necesario entender el proceso para saber que por su naturaleza podría tener efectos en personas con implantes metálicos en su inte- rior y establecer medidas correctoras que eviten esto. Por primera vez, no sólo somos conscientes de la existencia del riesgo, sino que se establecen los límites de exposición en el ámbito laboral y las reglas que permiten establecer o romper el nexo cau- sal entre la fuente del riesgo y la posible patología laboral. En el Instituto Tecnológico de Aragón disponemos de ejemplos concretos de mediciones para empresas. Entre otras destacan los estudios realizados de emisión de estaciones radar asociadas a diferentes aeropuertos de la geografía española para ENAIRE (Barcelona, Madrid, Sevilla, Tenerife, o Huesca, entre otros). Los trabajos implicaron análisis de las fuentes de emisión, definición de áreas de trabajo, ciclos de operación y la realización de medi- ciones (banda ancha, banda estrecha) y estudios complementarios cuyo objetivo no sólo se centraba en la simple verificación o no del cumplimiento de la norma sino que requerían de cálculos más pro- 25 LOGÍSTICA Y TRANSPORTE Figura 2.- Medida del nivel de emisiones en un área de trabajo (sala de amplificadores RF) en banda estrecha. El trabajo de evaluación no sólo se limitará a medir campos, sino que será necesario evaluar la naturaleza del trabajo, las ubicaciones de las personas y analizar los ciclos de trabajo fundos, sin cuya información no se podrían adoptar medidas para evitar o minimizar los riesgos existentes. Estos estudios permitieron afirmar que los niveles de campo eléctrico generados por las antenas radar en las frecuencias de transmisión no generaban ningún riesgo, en los emplazamientos de las personas que trabajan allí y áreas de público general en las poblaciones cercanas. Esta actividad ha tenido un gran impacto tanto laboral como social, ya que se ha podido informar a las per- sonas sobre los niveles a los que están sometidos, contribuyendo