entre las tuberías del intercambiador y las paredes del hueco. Se rellena con arena silí- cea calibrada o se cementa con una suspen- sión de cemento, bentonita y arena silícea al objeto de lograr un buen contacto térmico entre los tubos de la sonda y el terreno, cerrar el sondeo desde la superficie para evitar la entrada de contaminantes exteriores, y sellar los acuíferos que hayan podido ser atravesa- dos durante la perforación. Una vez cemen- tado el sondeo, se somete a la sonda a un ensayo de presión definitivo para comprobar que no existen fugas, y poder garantizar que, en condiciones normales de trabajo, la sonda tenga una vida útil de 50 años. El fluido circulante (caloportador) es el medio de transferencia térmica que circula por los tubos del intercambiador geotérmico. Se trata de agua o una mezcla acuosa con una sustancia anticongelante, que debe satisfacer los siguientes requisitos: impedir la formación de hielo en el evaporador de la bomba de calor durante el funcionamiento del sistema geotérmico en modo calefacción, proteger contra la corrosión los materiales que constituyen el circuito cerrado por el que circula, y ser biodegradable para no conta- minar el agua subterránea en caso de fuga. Aprovechamiento geotérmico El dimensionamiento de un sistema geo- térmico comienza por establecer las cargas de calefacción, refrigeración y ACS del edi- ficio, en función de las condiciones clima- tológicas locales. Continúa con la elección de las instalaciones y equipos encargados de satisfacer esas demandas, y finaliza con la determinación de la ubicación, número, separación y profundidad de los sondeos en los que se van a alojar los intercambiadores geotérmicos verticales. Para precisar esto último, en edificios con elevadas cargas térmicas se recurre a reali- zar ensayos de respuesta térmica del terreno en uno o varios sondeos perforados al efec- to. Con ello se obtiene la conductividad y la resistencia térmica efectivas del terreno, que dependen de los tipos de roca atravesados, los espesores de las diferentes capas, el flujo de agua subterránea, el relleno del sondeo y el material de los tubos. El ensayo se complementa con la simu- lación por ordenador del comportamiento que tendría el terreno en el transcurso de los años de utilización del campo de sondas geo- térmicas. Para instalaciones de pequeña po- tencia térmica, como es el caso de viviendas unifamiliares, normalmente con un máximo de cuatro sondas, el coste que comporta el ensayo y la simulación por ordenador no compensa. Existe una alternativa a los sondeos convencionales que cada vez más es apro- vechada en las obras urbanas; se trata del aprovechamiento geotérmico de las infraestructuras y obras subterráneas. Las infraestructuras subterráneas se pueden de- finir como un conjunto de estructuras por debajo del nivel de la superficie. Como la mayoría de ellas son construidas en obra de fábrica u hormigón de elevada conductividad térmica, su termoactivación como intercam- biador, incorporando circuitos de transferencia de energía que llevan en su interior un fluido caloportador, es la forma más usada. Algunos casos de este tipo de aprovecha- miento geotérmico en zonas urbanas son: las infraestructuras de transporte (ferrocarriles, metro, intercambiadores, etc.), las redes de servicio y abastecimiento (agua, alcantari- llado, gas, etc.), y algunos espacios públicos (centros comerciales, hospitales, etc.) o pri- vados (garajes). Energía geotérmica en Madrid Pasando al caso particular de la energía geotérmica en la Comunidad de Madrid, desde 2008 y dentro de la estrategia ener- gética regional, la Administración Regional en colaboración con otras entidades públicas y privadas, vienen desarrollando una polí- tica de fomento de la energía geotérmica, y más específicamente de la geotermia de baja entalpía en su uso para la climatización de edificios. El objetivo no es otro que aportar nuevos medios para hacer un uso más efi- ciente de la energía, para lograr mayores ahorros, y para reducir las emisiones de CO2 en la región. El desarrollo de las acciones se estructu- ra en cinco áreas de actuación que cubren todos los recursos geotérmicos y tecnolo- gías, principalmente las relacionadas con la geotermia de baja entalpía, a través de bom- bas de calor e intercambiadores verticales en sistemas cerrados, bien sea en sondeos o en Figura. 2: Anuncio del IV Congreso de Energía Geotérmica GeoEner 2014. www. geoner.es Figura 3: La Geotermia y la familia Geotermín (www.fenercom.com) cimentaciones y estructuras termoactivas, sistemas abiertos en acuíferos, con aguas de drenaje de túneles, etc.: Área de divulgación: donde se incluyen todas las iniciativas cuyo objetivo es dar a conocer tanto al público como a los técnicos, una amplia visión de la geoter- mia y sus posibilidades. Para este área se han editado guías explicativas, comics dirigidos a los más pequeños, vídeos, celebración de jornadas, participación en foros de divulgación, etc. Área de formación: que engloba todas las iniciativas cuyo objetivo es formar a los técnicos y empresas. En este área se incluyen iniciativas como la edición de guías geotérmicas especializadas, cele- bración de Congresos, participación en foros, organización de cursos, etc. Área de promoción económica y comer- cial: cuyo objetivo ersigue impulsar la utilización de la energía geotérmica y facilitar en la medida de lo posible los ca- nales para que las empresas e instalado- res que desarrollan su actividad en este campo puedan exponer sus productos y servicios. En este área se incluyen la cele- bración de Congresos, jornadas técnicas, así como facilitar el contacto al público con las empresas especializadas a través de Internet. También este área abarca el premio anual a las mejores instalaciones geotérmicas, y la publicación de las guías sobre proyectos emblemáticos en el ámbito de la geotermia. Área normativa y de aseguramiento de la calidad: en este área se incluyen ini- ciativas para garantizar que las instala- ciones cumplan con las condiciones de seguridad y calidad que le son exigibles. Se contemplan aquí las actividades para RHBN 38 DGIEM Comunidad de Madrid, Diciembre 2013 Tabla 1: Energía geotérmica en la Comunidad de Madrid.