Se han otorgado 367 subvenciones, por un valor total de 5.523.500 euros. La inversión total, con la aportación de los vecinos, ha sido de 7.802.752,95 euros los ciudadanos podamos volver nuestros ojos hacia una forma de vida más racio- nal y económica, apostando por habitar y mejorar nuestra ciudad, y dando a nues- tros barrios las condiciones que necesi- tan para su relevo generacional. En relación con esta idea, Javier Cabrero nos habla así de la filosofía de Crolec Re- habilitaciones: “Desde el principio hemos apostado por la rehabilitación de edificios existentes y nuestro personal está forma- do para ello, así como especialmente sensibilizado para prestar especial aten- ción a la convivencia vecinos-empresa, puesto que otro de los hándicaps que tienen este tipo de intervenciones es que convives con tus clientes durante todo el tiempo de desarrollo de la obra, algo completamente normal en otros trabajos pero que por lo general requiere un cam- bio de mentalidad en la construcción tra- dicional. Los edificios necesitan adaptar- se a las necesidades de los tiempos que corren, el envejecimiento de la población que precisa de accesibilidad a las vivien- das, el encarecimiento de la energía que nos impone reducir la necesidad del gas- to sin disminuir confort o más bien con una necesidad acuciante de aumentarlo, incluso edificios de reciente construcción carecen de un adecuado mantenimiento que hace que en parte queden obsoletos antes de tiempo”. El futuro de las ayudas Este modelo de rehabilitación con una gestión cuidada como ha sido el caso, ha calado rápidamente entre la pobla- ción, esto no debe hacer que como parte integrante del sector nos conformemos, muy al contrario, debemos ser muy am- biciosos y dar pasos de gigante si quere- mos conseguir un doble objetivo: cumplir con nuestros compromisos en materia de eficiencia energética y reducción de emisiones de CO2 con nuestros socios europeos y disfrutar de un sector, el de la rehabilitación, maduro y con prestigio social. Es el momento de hacer girar las ayu- das a proyectos más comprometidos con el medio ambiente, con las reduccio- nes de emisiones de CO2 y con el ahorro energético. Le estaremos dando a los beneficiarios una doble ventaja: edificios acordes con el presente y con el futuro inmediato; confortables y asequibles de mantener energéticamente hablando. En este sentido la Sociedad Municipal de Suelo y Vivienda de Valladolid y el Centro Tecnológico Cartiff están en estos mo- mentos desarrollando, en colaboración con la Unión Europea y varios socios más, el proyecto R2Citites. Por otro lado, es claro que nos en- contramos en un momento en el que el sector de la construcción se encuen- tra bajo mínimos, y esto supone un gran lastre para la sociedad, represen- tado fundamentalmente en una parte importante de trabajadores parados, difíciles de recolocar y que suponen una importante carga emocional y económica y un drama para muchas familias que no podemos obviar. En este sentido está demostrado el efec- to multiplicador de cada euro invertido por parte de la Administración, no sólo en forma de empleo generado tanto directo como indirecto sino de retor- no monetario inmediato; municipal vía licencias, tasas, etc.; estatal vía IVA, impuesto de sociedades, etc. Algunos estudios cifran este retorno directo a la Administración en una proporción de 0,5 € por cada 1 € invertido, por lo que la cuenta para los organismos públicos es sencilla. Sin embargo, no debemos olvidar que la situación económica no está para mu- chas alegrías y que si queremos conse- guir un sector consolidado nuestro obje- tivo debe ser llegar hasta nuestro cliente, que no es otro que el propietario o pro- pietarios de edificios. Debemos ser ca- paces de conseguir que nuestro cliente quiera gastar su dinero en lo que le ofre- cemos, porque lo percibe como impor- tante y porque confía en los profesiona- les que le atienden. Todos debemos, por tanto, asumir la parte de responsabilidad que nos toca, que no es precisamente pequeña. A la Administración debemos pedirle un mayor esfuerzo para, además de mante- ner los planes actuales, contar con una política cohesionada entre los distintos estamentos, sostenida en el tiempo y pensada a medio plazo. Quizá reduc- ciones en el IBI o desgravaciones para aquellas actuaciones de mantenimiento o eficiencia energética que cumplan con ciertos criterios nos pueda ayudar en la hercúlea tarea que todos tenemos por delante. Ana Belén Hernández Lara, Ingeniero Técnico Industrial Crolec Rehabilitaciones Avda. de Madrid, no 46, nave 3 47008 – Valladolid 7 anerr news