Ahorro energético en la vivienda En España no tenemos una buena praxis de ahorro energético, no existe un buen conocimiento so- bre la energía que consumimos y, lo que es más preocupante, sobre las pérdidas de energía que sufren nuestros hogares, que se traduce en una pérdida directa de nuestro dinero. Sólo hay que atender al nuevo sistema de tarifas eléc- tricas que pretende imponer el Gobierno, que supone que los usuarios no podrán conocer las tarifas que les cobrarán hasta que no les llegue la factura, lo que signifi- ca que el importe de cada kWh consumi- do será distinto según el tipo de contador instalado. La envolvente, por tanto, es uno de los factores más importantes que intervienen en el ahorro energético, y sin embargo no existe un conocimiento total de ello. ¿Cuántas veces el consumidor se pregun- ta si tienes un buen cajón de persiana o un buen aislamiento? No es algo de lo que el consumidor final se preocupe a priori. Sin embargo, es una de las dos medidas que especifica el IDAE para controlar el gasto de energía: medidas relativas a la envolvente y elementos constructivos, y medidas sobre los sistemas. De hecho, las mayores pérdidas energéticas se produ- cen a través de dicha envolvente, ya sea la ventana, la persiana o el cajón de ésta, fachadas, cubiertas, cerramientos, etc. El aislamiento, y el buen acabado de este, es uno de los elementos por tanto que nos permiten un gran ahorro ener- gético. Y así lo está viendo también la Ad- ministración, el pasado 1 de junio entró en vigor el nuevo decreto ley 235/2013, una regulación que obliga a establecer el Certificado Energético de todos los in- muebles a la venta o en alquiler. Con este documento se determinan los niveles de consumo energético y la emisión de CO2, a través de la calificación, que va de la ‘A’ a la ‘G’, de mayor a menor eficiencia energética, tal y como ahora conocemos en los electrodomésticos, siendo el ‘A’ el más favorable y el ‘G’ el menos eficiente. El objetivo de esta nueva normativa de Certificación Energética es promover la eficiencia de los edificios en un entorno en el que los recursos energéticos son limitados y muy costosos. La sociedad está empezando a ser consciente de los remedios de raíz, atendiendo a los ele- mentos constructivos, como son unas ventanas eficientes, pero también un buen cajón de persiana con aislamiento que impida la filtraciones de aire, incluso una cortina, ya sea estor, panel japonés o veneciana permiten mantener el equi- librio energético de la estancia sirviendo de obstrucción en las corrientes de aire. Prueba de ello son las Líneas de ayuda que el IDAE ha sacado para la rehabilita- ción Energética, con el Programa de Ayu- das para la Rehabilitación Energética de Edificios existentes del sector Residencial (uso vivienda y hotelero). Este programa se ha lanzado para promover actuaciones integrales que favorezcan la mejora de la eficiencia energética y el uso de ener- gías renovables en el parque de edificios existentes del sector residencial, así como cumplir con el artículo 4 de la Directiva 2012/27/UE, relativa a la eficiencia ener- gética. Ayudas por el Ministerio de Indus- tria, Energía y Turismo, que ascienden a 125 millones de euros. Entre las acciones que se deberán llevar a cabo se encuentra la mejora de la eficiencia energética de la envolvente térmica. Lo que se pretende con esto es que se lleven a cabo actuaciones que me- joren la calificación energética total del José Lopez, Director Técnico Persax Grupo 2 calificación energética inicial del edificio, según IDAE. Rehabilitación, la vía de escape del sector constructivo La rehabilitación se abre camino como la alternativa y el renacimiento de uno de los sectores más perjudicados por la cri- sis: la construcción. Las Administraciones Públicas están dejando a un lado la idea de rehabilitación de los edificios enten- dida como una necesidad puntual que atiende a algún deterioro de una parte de estos, y comienzan a asimilar la im- portancia de un nuevo concepto como es el de la rehabilitación térmica, en relación a criterios energéticos. Este cambio era realmente necesario en nuestro país, ya que más de la mitad de los edificios están construidos sin el aislamiento y protec- ción térmica adecuada, que conlleva una gran pérdida de energía y por tanto una menor eficiencia energética. De hecho, la puesta en práctica de medidas para la mejora del aislamiento térmico de los edificios, puede suponer ahorro energéti- co, económico y reducción de emisión de dióxido de carbono del 30%. Las medidas de rehabilitación se basan en lograr que los elementos de una vivien- da en contacto con el exterior aumenten su resistencia al paso del calor o del frío, edificio en: al menos, 1 letra medida en la escala de emisiones de dióxido de car- bono (kg CO /m2 año), con respecto a la RHBN 45