reducir la dependencia energética de los combustibles de origen fósil y reducir las emisiones de gases que contribuyen al calentamiento global. Todas estas medidas son principalmente de aplicación a los edi- ficios de nueva construcción, pero no debemos olvidarnos de la gran cantidad de edificios ya construidos y es por tanto donde se debe actuar. Así, las administraciones autonómica y local perió- dicamente ponen en marcha campañas para otorgar ayudas y subvenciones para la rehabilitación de edificios y viviendas. Rehabilitación de viviendas y edificios Para rehabilitar un edificio desde el punto de vista energético se debe actuar en cuatro ejes: • Soluciones arquitectónicas: por ejemplo, instalación de ais- lamientos, sustitución de cerramientos, empleo de nuevos materiales de construcción y técnicas constructivas, etc. • Uso de energías renovables: hoy en día están disponibles una gran variedad de fuentes de energía alternativas al petróleo, como la solar fotovoltaica, eólica, biomasa o la geotermia por citar algunas. • Empleo de equipos eficientes: emplear electrodomésticos, calderas, equipos de aire acondicionado, etc. de clase ener- gética A+ y superiores. • Realizar un uso eficiente de la energía: dotar al edificio o vivienda de control inteligente, es decir, de Inmótica o Domótica. Cualquiera de estas opciones es igualmente válida y sin duda, por pequeña que sea, ya contribuirá a que el edificio o vivienda sea energéticamente más eficiente. No obstante, la instalación de un sistema de control y automatización es una de las opcio- nes más económicas y que proporciona mejores resultados: a modo de ejemplo, en la ciudad de L’ Hospitalet de Llobregat en Barcelona se construyó en el año 2013 un edificio de 42 viviendas en el que se instaló un sistema de control y automa- tización en las zonas comunes del edificio y en cada una de las viviendas. El coste de este sistema de control y automatización representó tan solo el 1,2% del valor total de la construcción. Un sistema de control inteligente permite obtener soluciones integrales que interaccionen con el resto de sistemas, en base a cuatro preguntas: • ¿Qué condiciones de confort deseamos? • ¿Cuáles son los requisitos funcionales del edificio? • ¿Qué recursos naturales tenemos a nuestro alcance? • ¿Qué uso le daremos al edificio o vivienda? A partir de las respuestas a estas preguntas se definen las funciones que realizará el sistema de control y automatización, las cuales contribuyen a realizar un uso de la energía más eficiente: Entre las funciones que puede realizar el sistema de control y automatización destacan las siguientes: Ahorro en electricidad: • Control automático inteligente de la iluminación y la cli- matización en función de la luz y temperatura exterior, la zona, la hora del día o la presencia. • Control automático inteligente de toldos, persianas y cor- tinas en función de la luz y la energía solar. • Control automático del encendido y apagado de todas las luces. • Control o secuenciado de la puesta en marcha de electro- domésticos en función de las tarifas horarias. • Detección y gestión del consumo “en espera” de los electrodomésticos. • Programación de la desconexión de circuitos eléctricos no prioritarios. Ahorro en el gasto en combustibles: • Detección de la apertura y cierre de ventanas cuando está activada la climatización. • Implantación de sistemas de control y regulación centrali- zados para detectar y avisar en caso de averías, como una fuga de gas, provocando un corte del suministro. Ahorro en el consumo de agua: • Sistemas de control y regulación centralizados, detectan si se produce una inundación, dan señal de aviso, y provocan un corte del suministro. • Control inteligente de riego que a través de un sensor de humedad o de lluvia, detecta la humedad del suelo y de forma autónoma riega sólo cuando es necesario. • Sistemas de medición de la calidad del agua, facilitan la gestión del reciclaje de aguas grises. • Grifos inteligentes, gestionan el caudal y la temperatura del agua. Un sistema de control y automatización permite obtener ahorros del orden de un 20% a un 40% en la energía consumida, recu- perándose la inversión en algunos casos en un periodo inferior a los tres años. No obstante, las preguntas que nos pueden surgir tras conocer las ventajas de un sistema domótico o inmótico son: ¿Qué ahorro puedo conseguir? ¿Qué coste tiene la instalación de un sistema de control y automatización? Domótica 51