Una mirada a la sala de compresión en Bad Lauchstädt. Está prevista otra caverna para el almacén de gas natural de la VNG. Fuente: VNG. BOMBAS Y VÁLVULAS 14 Renovación de la sección de aislamiento sin dificultades La mayoría de las válvulas esféricas que ha instalado Hartmann son válvulas sencillas. Dado que los requisitos de seguridad eran especialmente exigentes, también se instalaron 40 válvulas esféri- cas dobles. Estas ofrecen una doble barrera y dos mecanismos de aislamiento perfectamente independientes en un solo cuerpo. Un sistema estanco, a prueba de burbujas y fácil de instalar que ofrece el doble de seguridad y ahorra espacio, tal y como señala la empresa. El diseño especial extracompacto de la válvula esférica doble se desarrolló como consecuencia de la necesidad de renovar una anti- gua sección de aislamiento en la línea de inyección principal. Esta sección constaba de una válvula esférica soldada con bridas. El cambio de la válvula soldada habría redundado en un tiempo impro- ductivo prolongado. Por este motivo, Hartmann Valves desarrolló una versión de válvula esférica doble DN 250 PN 250 con la misma longitud de la válvula estándar original. Tras un periodo de prueba con buenos resultados, en la planta de secado del gas se instalaron más válvulas esféricas dobles compactas con las mismas dimensio- nes. La extrema reducción de la longitud de las válvulas esféricas dobles fue muy beneficiosa. Dos juntas en el sentido del caudal También se diseñó una válvula a medida para las líneas de succión. Incluso las válvulas esféricas dobles más cortas eran demasiado largas. Hartmann solucionó este problema con un sistema de doble pistón que ofrece dos barreras en una sola válvula. El sistema incor- pora dos juntas en el sentido del caudal: una aguas arriba y otra aguas abajo. De este modo cumple el requisito de doble barrera, incluido un mecanismo de sustracción intermedio. En la actualidad, las diversas instalaciones de la planta cuentan con un total de 800 válvulas esféricas fabricadas por Hartmann Valves. En la planta se explotan diez pozos, además de instalaciones de com- presión, reducción de la presión, secado y control de la temperatura del gas natural. Con una profundidad de entre 2.900 y 3.000 metros, este yacimiento de gas agotado es la instalación de almacenamiento de gas más profunda de toda Europa. Las quince cavernas de Jemgum La planta de Wolfersberg es uno de los centros de almacenamiento de gas más antiguos que sigue operativo en la actualidad. No obs- tante, el aumento de la demanda de gas está haciendo necesario un mayor número de plantas de almacenamiento. Jemgum es un ejemplo reciente: en 2013 se inició el llenado de gas de las insta- laciones de almacenamiento. Durante los próximos años, EWE y Astora prevén construir 33 cavernas en la mina de sal de Jemgum. EWE planea construir 15 cuevas con un volumen de hasta 700.000 metros cúbicos cada una y Astora construirá 18 cuevas con un volu- men geométrico de hasta 750.000 metros cúbicos. “El volumen útil de gas que se puede comercializar es de aproxima- damente 4,1 TWh. La velocidad de inyección es de 2,3 GW (= 55 GWh/día) y la velocidad de retirada es de 2,875 GW (= 69 GWh/ día)”, explica Ralf Riekenberg, jefe de proyecto de la parte aérea y director de departamento en la planta de almacenamiento de gas de Jemgum. El gas natural almacenado en Jemgum se suministrará principalmente a los mercados de Alemania y el noroeste de Europa. Altas presiones, diferencias importantes Jemgum fue el enclave elegido por sus minas de sal subterráneas, que son formaciones idóneas para el almacenamiento del gas natural. Las cavernas que se están construyendo son gigantescas cavidades en las minas de sal que se forman mediante lixiviación con agua. El gas se almacena de forma segura a gran profundidad de la superficie en las formaciones salinas. Las paredes de sal presentan una ventaja: son un magnífico sellador. “Las cuevas son perfectas para inyectar y retirar el gas natural con rapidez. Permiten compen- sar de manera óptima las fluctuaciones en la demanda asociadas a la hora del día”, declaran los socios del proyecto EWE y Astora. Las válvulas garantizan el buen funcionamiento del sistema en la planta de almacenamiento de Jemgum. “Se utilizan con fines de