GAS 56 El gas renovable ya es una realidad dado que es viable tecnológica- mente y existe gran cantidad de materia prima. Su uso contribuye a mejorar la seguridad de suministro; la economía circular y a la independencia energética. Y es que el gas mejora tanto el clima como los niveles de contami- nación del aire, a través del transporte terrestre y marítimo, y en el ámbito residencial y terciario. Para uso vehicular es el combus- tible más e ciente, limpio y sostenible ya que conjuga en equilibrio importantes ventajas medioambientales, a través de la reducción de emisiones tanto de CO2 como de contaminantes y de una menor contaminación acústica. El gas natural también apoya la penetración de las energías renova- bles en el sector eléctrico. La Comisión Europea lo posiciona como el principal soporte de las renovables en su publicado 'Paquete de Medidas para la Energía Limpia de los Europeos-Winter Package', a sabiendas de que el gas natural es una garantía constante de sumi- nistro eléctrico cuando las condiciones climatológicas impiden el funcionamiento de las energías renovables. Así, en el camino para la consecución de los objetivos medioam- bientales en el año 2050, el gas natural constituye un actor principal en el campo energético, favoreciendo la competitividad industrial y el ahorro en los costes de la economía. Todas estas ventajas hacen que la participación del gas natural en el futuro mix energético sea fundamental, permitiendo seguir introduciendo renovables en el sistema energético y desplazando a los combustibles fósiles.• Datos de consumo de gas natural durante 2017, donde se puede comprobar que la industria es el principal consumidor. Durante la presentación se ha destacado el papel clave de los ciclos combinados en un escenario de bajas precipitaciones. La demanda de gas en España crece 1,5 veces más que Europa por la generación eléctrica y por la recuperación de la industria.