" Dudo que muchos de los lectores nunca hayan asociado algo tan cotidiano como las legumbres con las atmósferas explosivas" Por último, y no menos importante, una vez identificadas las sus- tancias que pueden generar una atmósfera explosiva, debemos evaluar si la cantidad de atmósfera explosiva presente, o capaz de generarse, es suficientemente importante como para requerir un DPCE. Para ello debemos recordar el objeto del RD 681/2003 que no es otro que el de proteger a los trabajadores expuestos a atmós- feras explosivas. Generalmente se tiene la falsa percepción que es necesario disponer de grandes cantidades de sustancia para estar en peligro, pero esto no es así como veremos a continuación. Tal y como se indica en la norma alemana BGR 104, para atmósfe- ras explosivas de gases y líquidos inflamables, volúmenes a partir de 10 litros de atmósfera explosiva en espacios confinados pueden generar graves daños a las personas. Se puede estimar por simu- lación el volumen y extensión de una atmósfera explosiva, pero para ello se requiere disponer de muchos datos que requieren los modelos matemáticos. Una forma mucho más sencilla para tener una noción de la probabilidad de generarse una atmósfera explo- siva de 10 litros es estimar la cantidad necesaria de sustancia para generarla. En el caso del benceno cuyo límite inferior de inflamabilidad es el 1,2% son necesarios únicamente evaporar 0,39 g de producto para generar 10 litros de atmosfera explosiva. Con la mayoría de polvos inflamables, basta con un depósito de polvo con espesor inferior a 1 mm repartido de manera homogénea por toda la superficie del suelo para llenar completamente una estancia de altura normal con una mezcla explosiva de polvo/aire en caso de arremolinarse. Evidentemente estos datos son muy conservado- res, aunque reales, pues no consideran un factor muy importante cuando evaluamos atmósferas explosivas como es la ventilación, pero ponen en evidencia que pequeñas cantidades de producto pueden generar graves daños a las personas. En el caso que se identi quen sustancias en el lugar de trabajo capa- ces de generar una atmósfera in amable en cantidades peligrosas, es necesario disponer de un DPCE, y en ese caso, es muy importante disponer de técnicos cuali cados para que el análisis realizado en el DPCE sea el adecuado y evite resultados que sobreestimen o infrava- loren la situación. Infravalorar el riesgo de explosión puede conducir a situaciones potencialmente catastró cas, mientras que la sobre- estimación conducirá a un exceso de medidas y empleo de recursos innecesarios.• >>19