Investigación 28 LOS FLUIDOS SUPERCRÍTICOS / Pascual Bolufer, AECC El proceso es básicamente una extracción y la deposición utilizando un fluido supercrítico (Fsc). La extracción es la separación del material soluble a partir de un residuo sólido o líquido, gracias a un disolvente o Fsc. La extracción supone la separación de porciones médicamente activas de una planta o tejido animal, a partir de componentes inactivos o inertes usando disolventes. Una matriz sólida, de oro o plata, la disolvemos con el Fsc, y arrastramos nanopar- tículas de la matriz, para formar una película monoatómica sobre un substrato. Nanopartículas de tipo esférico recubren unas fibras de algodón, y evitan la humedad y que se ensucien. Inicialmente la extracción supercrítica industrial comenzó con el tolueno supercrítico en la refinería de petróleo, como disolvente. Era útil el agua supercrí- tica, pero ha quedado superada por el CO2 supercrítico (scCO2). El dióxido de carbono tiene una temperatura crí- tica de 31 °C, muy próxima a la temperatura ambiente, y los materiales biológicos se pueden tratar a unos 35 °C. La presión crítica del scCO2 es de 74 bar. En la zona supercrítica el scCO puede disolver triglicéridos en una 2 concentración de solo 1% de la masa. Magnífico. En alimentación, el scCO2 ha hecho posible el café descafei- nado, manteca sin colesterol, carne con poca grasa, etc.