trata de un sistema cerrado mientras un manómetro tiene una apertura para la entrada de la presión. El muelle Bourdon de un termómetro está conectado con un capilar que acaba en su extremo con un tubo. Este capilar y el tubo están lle- nados con un gas inerte que se expande con un aumento de la temperatura. La expansión provoca una subida de la pre- sión, proporcional a la variación de la temperatura, y por lo tanto una deformación del muelle. Igual que en un manóme- tro un mecanismo convierte esta deformación en un movi- miento giratorio de la aguja indicadora. Un termómetro de dilatación de líquido aprovecha las caracte- rísticas de expansión de líquidos especiales, por ejemplo Xile- no, para la medición de la temperatura. A diferencia del termómetro de dilatación de gas no se utiliza un tubo Bourdon con mecanismo, sino tan solo un muelle espiral conectado di- rectamente con el árbol portaíndice. De esta manera, la expan- sión del líquido en el bobinado provoca un aumento de la presión y produce el movimiento giratorio de la aguja proporcional con la temperatura. Este sistema es más robusto pero se ofrece únicamente con una exactitud de clase 2 según EN 13190, mien- tras un termómetro de dilatación de gas alcan- za la clase 1. Este sistema prescinde de cualquier mecanismo y resulta por lo tanto mucho más económico que un termómetro de dilatación de gas y puede ser una opción interesante tam- bién en condiciones adversas en la industria de proceso que requieren cajas en acero in- oxidables. También existen versiones con contac- tos de alarma para aplicar como termostato o con transmisor con salida eléctrica. El ahorro puede alcanzar en algunos casos hasta dos tercios en comparación con las versiones de gas. I Termómetro de dilatación de líquido con caja de acero inoxidable, TGT70 Intellitherm.