43 ENTREVISTA ¿Y cómo ha evolucionado el mercado a lo largo de estos años? Los avances tecnológicos deben haber cambiado considerablemente la bioquímica y su aportación al bienestar de la sociedad... La influencia de nuestro trabajo se plasma fundamental- mente en los avances médicos, por ejemplo, en el diag- nóstico genético, en los análisis clínicos, y las nuevas terapias. Igualmente importante es el impacto en la bio- tecnología, generación de vacunas en sanidad animal, por ejemplo, en la agricultura con el control de plagas, en la alimentación, en los nuevos materiales, etc. Sería difícil imaginar la vida hoy día sin la bioquímica y la biología mo- lecular, quizá el impacto mas mediático reciente ha sido la aplicación de técnicas de laboratorio a la elaboración de recetas de alta cocina. ¿Cuál diría que es la situación actual de la bioquímica en España? Goza de una buena salud, con centros de excelencia de prestigio internacional, una buena organización en redes de trabajo, y lo que es posiblemente más importante, un nivel destacado en la docencia y la formación de nuevos profesionales en la universidad. Recientemente Asebio publicaba un informe en el cual se apuntaba que el peso de la biotecnología en la economía española se duplica durante los años de la crisis. ¿A qué cree que es debido? Es lógico que el avance empresarial que se consolida se dé en áreas donde hay un avance científico. La investiga- ción es un valor seguro de inversión. La cifra de negocios de las empresas usuarias de la biotecnología ha pasado de suponer el 2,98% del PIB en 2008 al 7,15% en 2011 y pocos sectores pueden presumir de conseguir semejante aumento. Pero, ¿qué pueden aportar los avances bioquímicos a la so- ciedad? Además de los ya mencionados a la sanidad, a la empre- sa, y al día a día del siglo XXI, se puede añadir que ofrece- mos docencia y formación especializada de alto nivel en universidades y centros de investigación. A la sociedad en general ofrecemos información y cultura científica. La inversión ha dejado de crecer y las ayudas a la investigación también. ¿Qué puede hacer o debe hacer la Administración? Háblenos de las posibles consecuencias para el sector que po- dría acarrear esta situación. La Administración debería de una manera decidida apostar por hacer lo que predica, es decir apoyar la formación, la investigación y el desarrollo como una forma segura y sostenible de generar em- presas y empleo competitivos. De forma si- milar a lo que se ha hecho en otros países de nuestro entorno, Alemania y EE UU, por ejemplo. La realidad es, sin embar- go, que esto se dice pero no se hace, lo que podría causar un daño irrepa- rable a nuestro sistema de ense- ñanza superior y de investigación competitiva. Investigar es como montar en bicicleta, si no peda- leas te caes, y desde el suelo, no se puede competir. I Foto: H. Berends. tecnología