La producción de las exclusivas unidades de competición del Porsche 911 RSR se realiza en el centro de Porsche Motorsport, en Weissach, Alemania. AUTOMOCIÓN 24 Así se construye un Porsche 911 RSR Las siglas RSR nacieron en 1973 cuando Porsche decidió participar por vez primera de forma oficial con el 911 en Le Mans y creó una unidad especial para competición que no estaba homologada para carretera. El actual Porsche 911 RSR es la evolución más extrema de ese concepto, un desarrollo que ha venido determinado por la normativa LMGTE. Aprovechando el reglamento, los ingenieros de Porsche han reubicado el motor, situándolo por delante del eje trasero, gracias a lo cual se consigue más espacio para los elementos aerodinámicos y un mejor reparto de pesos. La producción de las exclusivas unidades de competición del Porsche 911 RSR se realiza en el centro de Porsche Motorsport, en Weissach, Alemania. Hasta la fecha se han fabricado cuatro unidades para el equipo oficial y siete más que se han puesto a disposición de equipos privados cuidadosamente seleccionados. En las 24 Horas de Le Mans 2018 competirán diez de ellos, cuatro en la categoría LMGTE Pro y seis en LMGTE Am. De un 911 a un 911 RSR En la construcción del 911 RSR se parte de la carrocería desnuda de aluminio de un Porsche 911 de calle, sin los paneles exterio- res. Esta pieza sale de la línea de producción de Stuttgart y recibe un profundo trabajo de restructuración cuando llega a Porsche Motorsport, que afecta a varios apartados. En primer lugar, se refuerza con nuevas soldaduras, soportes para diversos elementos y la jaula de seguridad de acero, homologada por la FIA. Marco Ujhasi, responsable del Proyecto Porsche GT, explica que “no tuvimos que añadir muchas cosas, porque la carrocería es muy sólida, incluso sin la jaula de seguridad. Las zonas delantera y trasera son muy segu- ras y permiten mucha deformación. Lo más complicado es proteger al piloto de los impactos laterales, y por este motivo centramos el puesto de conducción lo más posible”. El trabajo más complicado se realiza en la parte trasera, para poder reubicar el motor, la transmisión y los soportes de la suspensión posterior. En el 911 RSR se parte del motor GT3, pero colocado por