EL POLÍMERO CON MEMORIA de forma que acaba autorreparándose con solo calentarlo 40<< En un mundo cada vez más automatizado, la ciencia juega un papel muy importante en la investigación y desarrollo de sistemas capa- ces de actuar por sí mismos. Cada vez es más habitual el estudio y desarrollo de materiales inteligentes, que modi can alguna de sus propiedades al ser sometidos a un estímulo concreto. Ejemplo de ello son los polímeros con memoria de forma, capaces de cambiar de forma bajo la acción de un estímulo, como, por ejemplo, la temperatura. Partiendo de anteriores investigaciones llevadas a cabo en el Departamento de Química Física de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la UPV/EHU relacionadas con el policicloocteno —un polímero semicristalino comercial—, la investigadora del departamento Nuria García Huete ha desarrollado diferentes sistemas poliméricos que han dado como resultado materiales versátiles que podrían tener múltiples aplicaciones en diversos campos. Los investigadores del equipo sabían que el policicloocteno presenta memoria de forma cuando se encuentra entrecruzado. La investigadora hace un símil para explicar su estructura: “Podríamos imaginar un polímero como un plato de espaguetis, donde cada espagueti sería una cadena individual del polímero. El entrecruzamiento consiste en una serie de uniones entre cadenas, lo que equivaldría a nudos entre Nuria García Hueterena. Una investigación llevada a cabo en el Departamento de Química Física de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la UPV/EHU, en colaboración con el BCMaterials, ha obte- nido nuevos materiales poliméricos con memoria de forma y no citotóxicos que podrían emplearse en un futuro para aplicaciones biomédicas, así como materiales que conser- van el efecto de memoria de forma y que además poseen capacidad de autorreparación con solo calentarlos, para alargar la vida útil de los materiales. INVESTIGACIÓN