46 ENVASES analizar la posición en la que se encuentra el envase ali- mentario a día de hoy, se parte de las funciones principa- les del envase convencional, presentadas al inicio de este artículo y que básicamente son contener, conservar y pro- teger la integridad del producto, e informar y vender el producto contenido. A. Contener el producto Inicialmente, la función de contener un producto alimen- tario terminaba en el momento en el que el producto se cocinaba y se consumía. La función era meramente con- tener el producto, a temperatura ambiente o refrigerada. Ahora, contener el producto puede significar en algunos casos soportar las temperaturas de congelación, ya que muchos de los productos se distribuyen congelados. En la mayoría de productos precocinados su introducción en el microondas o en el horno, sin que esto provoque una alteración del envase que pueda afectar al producto es un requerimiento. Una vez cocinado aparece una nueva función: contener el producto mientras se consume ejerciendo de plato. La definición de contener el producto sigue siendo acer- tada, pero cada vez más, cubrir esta función supone un proceso de mejora del envase. En muchos casos la solu- ción está en una combinación de diferentes materiales que consiga las propiedades deseadas. A.1. Materiales esterilizables Del mismo modo que el vidrio permitía la esterilización en el propio envase, las empresas de envases de plás- tico cuentan años después con la combinación de ma- teriales poliméricos, que permite realizar los tratamientos térmicos en el propio envase. Un ejemplo de este tipo de material es un compuesto laminado de PP/EVOH/PP. A.2. Envases microondeables El desarrollo de nuevos materiales multicapa permite que el consumidor introduzca el envase en el microon- das sin que se produzca una migración desde el envase hacia el producto. Ejemplos de estructuras utilizadas para este tipo de envases son PP/EVOH/PP o PET/Al/PP (2). El PP suele utilizarse porque presenta ciertas características deseables, como resistencia a la sorción de la grasa, es esterilizable y microondeable. PLASTICOS A.3. Envases horneables No solamente la introducción del envase en el micro- ondas ha sido un avance. Generar materiales que so- porten las temperaturas del horno manteniendo las propiedades del envase, o incluso permitir su cocción en ambos, ha sido y sigue siendo un reto para los fa- bricantes de packaging. El principal objetivo de estos envases flexibles o rígidos, es resistir altas tempera- turas durante un tiempo determinado. Actualmente existen algunas soluciones comerciales no solo para platos precocinados, sino también para productos de panificación. B. Conservar y proteger la calidad y la integridad del producto Inicialmente esta protección del producto se remitía a cumplir funciones más generales, como evitar el derrame del producto durante el transporte, impedir el intercambio de gases entre el interior y el exterior del envase o so- portar los posibles riesgos derivados del ciclo de distribu- ción. Actualmente, estas propiedades se consideran cubiertas por cualquier sistema de embalaje, por lo que el reto está en la participación activa del envase en la pro- tección del producto. Un envase activo tiene como función prolongar la vida útil o mejorar el estado de los alimentos envasados, median- te la incorporación de sustancias con ciertas propiedades beneficiosas o la eliminación de otras que pueden pre- sentar problemas para la conservación. La base de estos mecanismos es un transporte de masas que incluye una regulación de la permeación de gases en el espacio ca- beza, una retención de sustancias por sorción (3). Este sector del mercado pronostica un incremento en su volumen de ventas, que se verá reflejado sobre todo en los absorbedores de humedad, secuestradores de O2 y CO2 y envases microondeables (4). UNIVERSALES Envase renovable de cáñamo y lino. tecnología