65 ENVASES envases convencionales estaban mojadas y pochas, y aparecían mohos en los tomates, y microorganismos en todos los alimentos. En la capa externa se han incorpora- do absorbedores de humedad, que en el caso de las en- saladas resultan de vital importancia, puesto que cuanto más tiempo permanezca seco el producto más tiempo conservará su mejor apariencia. Por último, en todas las capas del envase se ha contado con aditivos plastifican- tes que también son biodegradables y que mejoran las propiedades del material de cara a su procesado indus- trial. Concretamente, se ha logrado elevar la flexibilidad del ácido poliláctico convencional un 30%. Además de todo ello, esta estructura multicapa permite utilizar cada aditivo solo en la capa en la que es necesario, con lo que se obtienen varias ventajas añadidas: La pri- mera un envase de menor espesor y el resto son deriva- das de ésta, ya que se logra un ahorro tanto de material, como de peso. Transformación en compost En los envases desarrollados en el proyecto PLA4FOOD todo son ventajas, incluso una vez éste se desecha. El material con el que se ha fabricado esta nueva generación de envases alimentarios tiene su origen en fuentes reno- vables que además hacen de él un material biodegradable y compostable. Una vez termina su función como conti- nente para alimentos y en condiciones de compostaje, el envase se ha comprobado que se convierte en abono gra- cias a una serie de condiciones de compostabilidad. I tecnología