ENTREVISTA ¿Qué podría decirnos de los nuevos diseños? Un gran número de medidas que han implantado las em- presas se centran en los rediseños de producto, en cuan- to a su presentación o su forma, ya que permiten ahorrar gran cantidad de material. Otras iniciativas se ajustan al usuario con envases que se adaptan a sus necesidades (monodosis, familiares, etcétera) o a la optimización de la logística y el almacenamiento. Por otra parte, el aligera- miento en los envases, que hace referencia a la mejora de los materiales y técnicas de transformación y llenado, es otra de las tendencias gracias a la que ya se ha logrado reducir en un 16% el peso de los envases desde 1999. Comenta que también se busca mejorar o aportar nuevas funciones ... Sí, se trata de ajustarse a las necesidades del consumidor actual, ahorrándole parte del poco tiempo libre que su ritmo de vida le permite, de manera que pueda dedicarlo a actividades de ocio. Este es el caso de los envases que mejoran su aptitud para horno y microondas, garantizando la conservación y las propiedades de los alimentos, o los envases autocalentables y autoenfriables, que permiten que el producto se consuma en condiciones óptimas fuera del hogar. ¿Y en cuanto a los materiales? Las nuevas tendencias están encaminadas a incorporar materias primas secundarias (recicladas), desarrollo de envases de bioplásticos, celulósicos y recubrimientos, así como la línea de investigación enfocada a la incorporación de nanopartículas que mejoren el comportamiento de materiales más convencionales. ¿Qué nuevos materiales y formatos están por llegar? Quizá el campo más llamativo para el usuario sea el rela- cionado con los envases activos e inteligentes. Los acti- vos son aquellos que incorporan al producto compuestos que colaboran en su conservación. El consumidor está cada vez más preocupado por el valor nutricional de lo que come, y términos como ‘colorantes y conservantes’ tienen mala prensa. Estos envases activos permiten “sacar” del alimento este tipo de elementos, que son in- cluidos en la pared del envase, de manera que éste inter- actúa con el producto liberando o absorbiendo sustancias que aceleran su degradación. En resumen, de alguna ma- nera potencian la función de conservación que ha venido teniendo el envase desde su concepción.