43 MOLDES Las regiones de Marinha Grande y Oliveira de Azeméis concentran la mayor parte de empresas del sector y están históricamente ligadas: si la primera nació para aprovechar las sinergias de la industria del vidrio de esta zona, la segunda inició su andadura de la mano del herma- no del que está considerado el primer moldista portugués, pionero e innovador, Anibal Abrantes. Precisamente la in- novación, junto con una metódica inversión en alta tecno- logía y un estricto control de calidad son algunos de los ingredientes de esta industria. “Precio, plazos y calidad, con ello afianzamos a los clientes”, afirman varios de los industriales visitados. Y es cierto. Máquinas japonesas, ale- manas, suizas, italianas y alguna española —de 3 y 5 ejes, modelos de alta velocidad y otros más convencionales— conviven en las diferentes instalaciones visitadas para dotar de los recursos necesarios a los operarios, junto a un importante programa de gestión de herramientas y auto- matización. Y cada 3-5 años de media se renueva parte del parque de maquinaria: “Estar a la última en tecnología permite reducir costes y tiempo. El cliente compra tiem- pos de ciclo y garantía, no sólo producto”. Esto pasa tam- bién por apostar por máquinas multifuncionales que permitirán reducir el tiempo de producción y, en conse- cuencia, el coste final al cliente. La marca Engineering & Tooling from Portugal potencia al sector del molde luso El caso más paradigmático en actualización tecnológica quizá lo representa una de las instalaciones de Marinha Grande, donde, de los dos pabellones de producción de que disponen, uno está totalmente automatizado, sin más empleados que los ingenieros de programación, con una sección a temperatura controlada y un sistema de gestión en red que permite a cualquier empleado de la empresa saber en qué fase se encuentra la producción. Sin embargo inversión e innovación no lo son todo. Algo debe distinguir a estos profesionales que les ha valido el reconocimiento internacional. “Sabemos improvisar, in- novar sobre la marcha y tomar decisiones rápidas”, afir- mó el representante de una de las más importantes empresas, con sede en Marinha Grande pero también presencia internacional. “Quizá no somos muy buenos planificando pero sabemos reaccionar rápidamente ante los nuevos retos”, añadió. Y es que cada día supone un nuevo reto para estos profesionales. En general, tanto en Marinha Grande como Oliveira de Azeméis se encuentra una amplia diversidad de empre- sas, con facturaciones que oscilan entre los 2 y los 104 millones de euros en 2012 —muy positivo respecto PLASTICOS UNIVERSALES panorama