ESTUDIO DE MERCADO 95 Producción del sector construcción por países. Estimación 2019 y proyección de crecimiento anual promedio 2020-2022 a precios constantes. Situación y previsiones en Europa: alta producción, pero poco crecimiento La economía global está aflojando el ritmo y aunque en Europa no se espera que el crecimiento se interrumpa, sí que está aflorando una mayor aversión al riesgo que puede acabar perjudicando al sector construcción. La combinación de este clima menos propicio con el hecho de que en los años precedentes la construcción había registrado crecimientos sustanciales (3,6% anual de promedio en 2017-18) presagiaba dificultades para 2019, que finalmente no se han materializado en su totalidad, puesto que se estima que el año cerrará con un avance del 2,3%. Será en los años siguientes cuando la construcción pasará a ir a remolque de la economía y se limitará a crecer entorno al 1% del 2020 al 2022. Con una tasa de crecimiento tan exigua, es de suponer que unos cuantos países deberían estar en zona negativa. Pero en realidad se prevé contracción en muy pocos mercados: el problema es que en esa lista aparece Alemania durante todo el período de previsión, y también Francia, aunque solamente durante 2021. Evidentemente, si el crecimiento se complica en dos países de esta dimensión, se penaliza mucho el agregado europeo. Por otra parte, el contraste entre los mercados en retroceso y los más expansivos no es tan extremo como en años recientes, en los que era frecuente ver a Irlanda y a los países del Este creciendo a doble dígito. Para los años siguientes, solamente Irlanda se destaca en la cabeza del ranking de crecimiento, pero por debajo del 6%. El ciclo de la edificación residencial no se manifiesta de una manera sincronizada en todo el continente: de los 19 países observados por Euroconstruct, en 5 de ellos la producción ya ha tocado techo claramente y se está contrayendo, mientras que en otros 4 se prevé que la inflexión llegue en algún momento entre 2019 y 2021. En los 10 restantes, la previsión hasta el 2022 aún no contempla que el crecimiento se interrumpa. Francia se encuentra en el pri- mer grupo de países en donde el ciclo ha cambiado más temprano, mientras que Alemania y España pertenecen al segundo en donde el cambio es inminente. Debido a ese goteo progresivo, el agre- gado europeo se irá desacelerando en 2019 (1,8%), se detendrá en 2020 (0%) y finalmente se contraerá en 2021 (-1,4%). La proyec- ción para 2022 (0,5%) es reflejo de cómo buena parte de Europa no se cuestiona que haya problemas graves en los fundamentos de la demanda residencial; tan solo hace falta un cierto ajuste por el lado de la oferta, algo que tampoco es extraño en un sector que manera ininterrumpida durante seis años. El crecimiento anual promedio 2020-2022 es del 0,3%. Tal y como destacó Fontana, “la vivienda toca techo en 2017-2018 y 2019-2021. El ciclo residencial europeo se está agotando de manera natural, lo que provoca un aumento de las exigencias, costes al alza, déficits de mano de obra, déficits de suelo y, todo esto, se traduce en una escalada de precios. En definitiva, el entorno económico se complica”. En la edificación no residencial también se percibe una atmósfera de mayor cautela inversora y la previsión contempla que del 2% de crecimiento en 2019 se pasará al 0,2% en 2020. De nuevo, es el producto del empeoramiento de unos pocos países, pero de gran peso específico. Como en la vivienda, nos volvemos a encon- trar con retrocesos de la producción en Francia y Alemania, a los que también se suma el Reino Unido. Sin embargo, tanto Francia como el Reino Unido confían sufrir tan solo un bache temporal, de manera que volverán a crecer de nuevo de 2021 en adelante, lo cual no tardará en repercutir en el agregado europeo de 2021 (1%) y 2022 (0,9%). Aparte de estos vaivenes de la producción, también se esperan cambios en la estructura interna del mercado no residencial. Los nichos con una mayor participación de la promoción pública (educación, salud) fueron recesivos durante el trienio 2016- El jefe del Departamento de Mercados del ITeC, Josep R. Fontana. ha alcanzado un alto nivel de producción tras haber crecido de