Las soluciones de Weinor y Griesser permiten disfrutar de la terraza durante todo el año La llegada de los meses primaverales y estivales no se percibe de la misma manera en todos los países europeos. Al sur de los Alpes los días se alargan y hay más horas de luz solar, lo cual invita a disfrutar de la vida al aire libre. Al norte de la cordillera, en cambio, los días lluviosos sigue siendo habituales. Para paliar estos inconvenientes, Weinor ha desarollado sus techos acristalados, que protegen las terrazas frente a diferentes condiciones meteorológicas. Debido a que es menos frecuente, la lluvia en las latitudes del sur de Europa siempre es bienvenida. Sin embargo, en el norte de Europa los amantes de las terrazas no es lo que siempre desean, ya que durante el verano apetece disfrutar el mayor tiempo posible de la vida al aire libre, sin que la climatología altere sus planes. Hoy, no disfrutar de esos meses de verano no es culpa de las condiciones del tiempo, sino de no contar con el equipamiento adecuado. Si un techo acristalado protege la terraza, resulta agradable permanecer al resguardo de la lluvia veraniega mientras el aire fresco cruza la estancia y el agua repiquetea sobre el techo. Gracias a los sofisticados sistemas de techo acristalado de Weinor, es posible adaptar la terraza para protegerla de la lluvia y a prueba de las condiciones climatológicas. De esta manera, los sistemas de techo acristalado Weinor permiten convertir la terraza en un auténtico ‘oasis de vidrio’. El proceso se puede iniciar instalando un tejado de vidrio sobre la terraza que evite desagradables sorpresas como la lluvia en momentos inoportu- nos. Opcionalmente, también se pueden añadir paredes de vidrio que protejan de las frías brisas nocturnas. Asimismo, para aquellos que no tengan suficiente con su terraza pueden hacerla todavía más grande con elementos de vidrio correderos o plegables y crear invernaderos totalmente cerrados. Con la combinación de todos estos elementos, la temporada de terrazas puede iniciarse tan pronto empieza la primavera y continuar hasta el otoño. Accesorios adicionales, como iluminación LED y radiadores eléctricos aseguran un ambiente confortable y cálido cuando los días empiezan a acortarse. Asimismo, cuando en el exterior el verano se muestra en su máximo esplendor, las paredes de vidrio pueden plegarse a un lado. Techos de cristal y toldos para cualquier tiempo Como se ha dicho, los techos de vidrio y verandas alargan el verano. Sin embargo, cuando el sol es intenso, el efecto invernadero puede notarse bajo el vidrio. Los rayos solares traspasan el vidrio y los niveles locales de calor se incrementan de modo apreciable. Esto quiere decir que un tejado de vidrio o invernadero puede incluir también un toldo textil que proporcione sombra durante el tiempo soleado y que se pueda retirar fácilmente cuando hay nubes. La solución ideal en estos casos es una combinación con motorización que pueda actuar automáticamente a través de sensores solares, de viento o de lluvia. 35 HORECA