de las oportunidades del mercado de la RESINA ALQUÍDICA con el fin de crear un futuro sostenible para la industria del recubrimiento en Europa a creciente presión normativa y la demanda de productos más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente está produciendo en la industria del recubrimiento la necesidad de evolucionar, lo que está llevando a una búsqueda de tecnologías que cumplan estos requisitos sin comprometer el coste ni el rendimiento Con un contenido de más del 50 % de aceites naturales y ácidos carboxílicos procedentes de fuentes de plantas renovables, las resinas alquídicas son una elección lógica para los recubrimientos sostenibles en comparación con otros sistemas de resina a base de productos petroquímicos. Después de un periodo de declive, el mercado de recubrimientos alquídicos se ha estabilizado en los últimos años y goza actualmente de un modesto crecimiento. Como tecnología probada a fondo, los alquidos ofrecen numerosas ventajas de rendimiento que los convierten en una opción atractiva para los formuladores de recubrimientos, particularmente para aplicaciones en madera, debido a que el tiempo de secado es lo suficientemente largo como para permitir la penetración en el sustrato de ésta. Los sistemas de base disolvente con bajo contenido de COV están ampliamente disponibles, al igual que los sistemas a base de agua, cuyo rendimiento está en mejora constante, con la ventaja añadida de contar con unas credenciales medioambientales superiores. También se valora, especialmente entre los pintores profesionales, el hecho de que las pinturas a base de alquidos ofrecen ventajas de rendimiento que otros sistemas no pueden igualar, sobre todo en lo que se refiere a la facilidad de aplicación y a la posibilidad de aplicar varias capas en un corto periodo de tiempo. A continuación exploraremos las oportunidades y los retos a los que se enfrenta el mercado de las resinas alquídicas para contribuir a un futuro más sostenible de la industria del recubrimiento en Europa y consideraremos el mercado desde la perspectiva de tres organizaciones muy diferentes, pero con visión de futuro. Breve historia de las resinas alquídicas Las resinas alquídicas hace tiempo que han logrado su reputación ecológica sobre la base de su contenido en ácidos grasos naturales y poliol, que compone la mayor parte de la resina. Ya en los años 30 del siglo pasado, los alquidos habían conseguido reconocimiento por su rendimiento de alta calidad y por su aplicación con brillo, debida a su bajo peso molecular. El secado oxidativo también proporcionó buenas propiedades de desarrollo de la dureza y resistencia a la corrosión. En los años 50, el surgimiento de la tecnología de polimerización en emulsión impulsada por los polímeros acrílicos y vinílicos hizo posible crear productos a base de agua que eran más fáciles de limpiar y más económicos de fabricar, como resultado de los precios más bajos del petróleo crudo. Estas nuevas pinturas a base de agua captaron la mayoría del mercado de recubrimientos L de tipo arquitectónico. En los últimos años, el objetivo se ha puesto en el desarrollo de recubrimientos duraderos y sostenibles, buscando soluciones que contribuyan a la transición de los productos fósiles a los biológicos con un rendimiento equivalente. Las resinas alquídicas se han fabricado tradicionalmente a base de disolventes, pero los requisitos normativos para reducir las emisiones de COV han sido el detonante del desarrollo de alternativas a base de agua. Los primeros polímeros alquídicos de base biológica y pinturas a base de agua se lanzaron en 2011; esto fue posible gracias a desarrollos fundamentales en el mundo de los tensoactivos. Desafortunadamente, estas pinturas a base de agua no lograron el éxito esperado, ya que los altos volúmenes de surfactantes EXPLORACIÓN 28 - Industria de la Pintura
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