El mercado portugués de los pavimentos de madera es modesto. Los últimos datos disponibles del año 2018 muestran unas ventas de 645.000 m2 en un país de poco más de diez millones de habitantes. Sin embargo, Portugal tiene dos peculiaridades. De entrada, la existencia de fabricantes importantes, algunos destacados exportadores, entre ellos Castro WoodFloors, Ribadao, J&JTeixeira, XPZMadeiras o A.Barbosa. Varios de ellos exponen regularmente en Domotex Hannover y tienen una presencia consolidada en el mercado estadounidense. En 2018 la producción de suelos de madera en Portugal alcanzó los 961.000 m2, cifra muy superior al consumo nacional, sin contar con las importaciones europeas o asiáticas que ascendieron a 375.000 m2. Las exportaciones de pavimentos de madera alcanzaron los 691.000 m2, lo que significa que la industria lusitana del parquet exporta más de dos terceras partes de su producción. La otra característica del mercado portugués del parquet es su tradicional coexistencia con un producto enormemente versátil, y estrechamente vinculado a los revestimientos de suelo y de pared, como es el corcho. Hablamos de un material natural cien por cien mediterráneo del que Portugal es indiscutiblemente el líder internacional ya que produce más de un tercio de la producción mundial de corcho. De hecho, el grupo Corticeira Amorim es el principal productor global de productos de corcho, desde tapones hasta aplicaciones para el sector aeroespacial, incluyendo la amplía gama de pavimentos de Amorim Cork Flooring con las marcas Wiparquet y Wise. No en vano, es uno de los principales grupos industriales del país. También existen otros fabricantes de pavimentos en base de corcho de gran originalidad y belleza estética como Granorte. O destacados fabricantes de tarimasWPC como CDECK o EPW. Volviendo a los pavimentos de madera, vale la pena comentar que el origen de muchos de los fabricantes portugueses de parquet se encuentra en la potencia de la industria maderera surgida de sus antiRibadao guas colonias africanas. En este sentido, Miguel Costa, Export Manager de CastoWood Floors, explica que «a causa de nuestro pasado colonial Portugal tenía, y sigue teniendo, una presencia y contactos privilegiados en las relaciones comerciales con África y Sudamérica. De ahí viene la importación, y posterior distribución, de maderas tropicales para toda Europa». A partir de ahí, comenta Miguel Simöes, Area Sales Manager de Ribadao, estas empresas se dieron cuenta de que podían añadir valor a este material y, por qué no, fabricar ellas mismas la tarima, aunque ahora se trabaja muy poco con maderas tropicales». A pesar de la importancia de su industria del parquet, y quizás por las limitaciones del mercado nacional y su vocación exterior, en Portugal no existe una asociación nacional de fabricantes. Por eso hasta hace muy poco la Federación Europea de Industrias de Parquet – FEP no incluía datos del mercado portugués en sus estudios y estadísticas. En el año 2017 la información de Portugal y de tres pequeños mercados europeos (Croacia, Estonia y Eslovenia) se incorporó por primera vez a las estadísticas del mercado europeo del parquet. La última Asamblea General / Congreso Europeo del Parquet de la FEP tuvo lugar en Lisboa en junio de 2019. Entonces Francisco Principe, presidente de Castro e Filhos / Castro Wood Floors, pronunció el discurso de saludo y bienvenida a los asistentes. La industria portuguesa El fabricante Castro Wood Floors cumplió el año pasado cincuenta años de actividad en el sector de la madera desde la inauguración en 1970, en la ciudad de Guimaräes, de un aserradero, Castro & Filhos, dedicado al suministro de madera aserrada para carpintería. Durante décadas se ha especializado en el tratamiento de maderas duras de todo el mundo. La experien-
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