Ramón Ruberte Auré, presidente de Anefa. ÁRIDOS 30 Una vez consolidados los datos estadísticos de consumo de áridos para 2018, el crecimiento ha sido finalmente inferior al previsto, alcanzando el +6,6%, para un consumo total de áridos naturales para la construcción de 121 millones de toneladas, pero siempre partiendo desde valores todavía muy bajos y con gran variabilidad territorial. Desde el máximo previo a la crisis (2006), momento en el que la producción era de 486 Mt, el consumo de áridos para la construcción sigue en el -75,1% de lo registrado aquel año. El sector espera que, el hecho de estar inmersos en una interminable sucesión de periodos pre- electorales, electorales y post-electorales no termine pasando factura al tímido crecimiento de un sector que está muy lejos de poder hablar de recuperación. El consumo nacional de áridos creció un 6,6% en 2018 Frágil crecimiento El sector de los áridos es el principal suministrador de materias primas para la construcción de infraestructuras, para la edificación, para la industria y para la protección del medio ambiente, lo que le confiere el carácter de industria estratégica. Es la segunda materia prima más consumida por el hombre después del agua y cada español ha consumido, en 2018, unos 2.590 kilo- gramos anuales, es decir unos 7,1 kilogramos diarios (en 2007 se consumieron cerca de 33 kilogramos diarios). Los áridos se emplean en estas obras, como hormigón preparado, prefabricados de hormigón (el 80% del hormigón son áridos), mor- tero, aglomerados asfálticos (el 95% son áridos), construcción de carreteras (el 94% de los materiales necesarios para una carretera son áridos), ferrocarriles (balasto), etc. Estos materiales se emplean, mayoritariamente en las etapas inicia- les de las obras, por lo que la evolución de su consumo es un buen indicador adelantado de la eficacia de los planes de infraestructuras. Según las estimaciones finales de Anefa, el año 2018 se ha cerrado con un crecimiento del 6,6%, para un consumo total de áridos naturales para la construcción de 121 millones de toneladas. No obstante, se ha experimentado en el ejercicio una desaceleración respecto a las perspectivas iniciales. Además, se mantienen varia- ciones territoriales importantes y una Comunidades Autónomas experimentó un nuevo decrecimiento. A esta cantidad hay que añadir 1,7 millones de toneladas de áridos reciclados y 0,7 millones de toneladas de áridos artificiales. El con- sumo total de áridos para la construcción alcanzó los 123,3 millones de toneladas. Es importante resaltar cómo la aplicación de los principios de la economía circular va avanzando de forma progresiva. Además, de los áridos reciclados y artificiales, ya citados, dentro de las cifras de áridos naturales, se contabilizan 5,2 millones de toneladas de áridos procedentes de otras industrias extractivas que los producen como subproductos de los procesos de extracción y tratamiento princi- pales. Es decir que, sobre los 123,3 millones de toneladas de áridos para la construcción producidos en 2018, 5,8 millones de toneladas (4,7%) no proceden de explotaciones de áridos.