26 ESTUDIO DE MERCADO infraestructuras de transporte, con una aportación sustancial desde el nicho del ferrocarril. Las compañías eléctricas siguen sin recupe- rar el ritmo constructor de los pasados años, aunque la subida de los precios de la energía podría contribuir a que replanteasen sus estrategias inversoras. Situación y previsiones en España: El exceso de dependencia de la vivienda de nueva planta puede pasar factura al sector La economía española también se resiente de la ralentización eco- nómica global y entra en una fase de menor crecimiento. Con el consumo y las exportaciones perdiendo tracción, y con los famosos ‘vientos de cola’ extinguiéndose (precios del petróleo) o en vías de hacerlo (finalización del QE), ya no se puede seguir manteniendo el vigoroso ritmo de crecimiento del trienio 2015-17. La previsión contempla una desaceleración suave del PIB desde el 2,6% del 2018 al 2,0% del 2021. Tras observar indicios de fatiga en bastantes indicadores econó- micos, cabe preguntarse si el sector construcción puede verse arrastrado. Obviamente, la construcción no es inmune al enfria- miento económico, pero hasta ahora apenas se percibe reacción alguna: el empleo en construcción continúa creciendo más que el resto de sectores, y mientras los índices de confianza del comer- cio y la industria se degradan en lo que llevamos de 2018, los de la construcción aún resisten. El crecimiento a corto plazo parece no estar amenazado y hay suficiente cartera de proyectos para esperar avances de producción del 5,7% en 2018 y el 4,5% en 2019. El pano- rama a medio plazo es más incierto, puesto que para 2020-2021 ya no se contará con el efecto tractor de las elecciones municipales del 2019 y podrían haber quedado ya cubiertos los vacíos de oferta de vivienda que tanto han contribuido a sacar al sector de su letargo. En ausencia de otros nichos de mercado que tomen el relevo, el con- junto del sector se ralentizaría al 3% (2020) y al 1% (2021). Si el sector construcción español lleva cuatro años en positivo es consecuencia principalmente de la recuperación de la edificación residencial. La demanda de vivienda no presenta por el momento síntomas de tocar techo y se espera que tanto 2018 como 2019 sean años de crecimiento robusto (11% y 8,5%, respectivamente). Sin embargo, hay razones para desconfiar de que el mercado con- tinúe creciendo a semejante ritmo, ignorando factores como la escalada de precios en las zonas de más demanda, y riesgos como el encarecimiento del crédito y el progresivo agotamiento del ciclo de oportunidad inversora. Tras el precedente de la década pasada, en el que el sector reaccionó muy tarde ante el cambio de signo del entorno, es complicado prever en qué momento puede llegar la inflexión, pero cuando menos podemos anticipar que el repliegue no debería ser traumático, puesto que en este episodio promotor las cantidades absolutas de nueva vivienda han sido extremada- mente modestas. Como primer tanteo, Euroconstruct plantea un escena- rio en el que 2020 aún permanece en la zona positiva (3,5%) pero 2021 ya no (-3%). Evolución por subsectores en el mercado europeo (Índices de producción a precios constantes, base 2014=100). Evolución por subsectores en el mercado español (Índices de producción a precios constantes, base 2014=100).