79 Si ahora cruzamos entre sí el 20-80 de productos y el 20- 80 de clientes, obtenemos que dentro de lo que nos com- pran el 20 % de nuestros clientes (clientes A), está el 20 % de nuestros productos (productos A), es decir, que su- pone el 20 % * 20 % = 4 % de las transacciones totales de la compañía; que nos proporciona el 80 % del 80 % del beneficio total, es decir, el 64 %. En otras palabras, sólo el 4 % de las transacciones (medidas línea de pedido por línea de pedido) nos dan el 64 % de todos nuestros beneficios. ¿Cómo podemos hacer uso de este hecho? De acuerdo a la figura representada, si cruzamos el ABC de clientes con el ABC de proveedores, obtenemos que lo primero es ofrecer los niveles más altos de servicio y disponibili- dad (tener el producto o prestar el servicio cuando el cliente lo pide) a los clientes clave que pidan productos clave. En el otro extremo debemos revisar constante- mente a los clientes menos beneficiosos y los productos menos beneficiosos. Entre ambos hay campo para un cierto pragmatismo basado en, por ejemplo, el valor críti- co que un producto puede tener para un cliente, que re- sulta interesante a considerar en el desarrollo de una estrategia de servicio para repuestos. En general, pode- mos establecer los siguientes criterios: - Clientes A y productos A: Proteger - Clientes A y productos B, Clientes B y productos A: Desarrollar - Clientes A y productos C, Clientes B y productos B, Clientes C y productos A: Mantener - Clientes C y productos B y C, Clientes B y productos C: Revisar con frecuencia I logística aplicada