4 Director Ibon Linacisoro Redactora Jefa Nerea Gorriti Redactor Jefe Delegación Madrid David Muñoz Equipo de Redacción Esther Güell, David Pozo redaccion_op@interempresas.net Edita: grupo www.novaagora.com Amadeu Vives, 20-22 • 08750 Molins de Rei (Barcelona) Tel.936802027-Fax936802031 Delegación Madrid Centro de Negocios Eisenhower, edificio 4, planta 2, local 4 Av. Sur del Aeropuerto de Barajas, 38 28042 Madrid - Tel. 91 329 14 31 Director General Albert Esteves Castro Director Adjunto Àngel Burniol Torner Medio colaborador de: Audiencia/difusión en internet y en newsletters auditada y controlada por: Nova Àgora es miembro de: Director Técnico y de Producción Joan Sánchez Sabé Director Comercial Aleix Torné Navarro Director ejecutivo Ángel Hernández Director de operaciones y proyectos Ricard Vilà Publicidad comercial@interempresas.net Administración administracion@interempresas.net Suscripciones A través de internet: www.interempresas.net/suscripciones Por correo electrónico: suscripciones@interempresas.net Por teléfono: 936 802 027 www.interempresas.net ! Queda terminantemente prohibida la reproducción total o parcial de cualquier apartado de la revista. D.L. B-25.481/99 / ISSN 1578-8881 Un poco de oxígeno para el sector Según los últimos datos de la patronal de las grandes constructoras, Seopan, la lici- tación de obra pública creció en España un 76% durante el primer semestre del año. Aunque es un dato claramente positivo tampoco hay que echar las campanas al vuelo, ya que esta subida se produce tras encadenarse la peor serie histórica en concesión de obra. De ‘la nada’, por poca subida que haya, ésta estará sobredimensionada. Además, hay que tener en cuenta que casi una tercera parte de la licitación concedida en estos seis primeros meses tuvo como destino trabajos relacionados con la alta velocidad ferroviaria, sacándose a concurso proyectos para el AVE por valor de 1.997 millones de euros (cuatro veces más que en el año anterior). Esto confirma que la gran apuesta del Gobierno sigue pasando por completar la red ferroviaria de alta ve- locidad y no tanto por las carreteras, verdadero eje vertebrador de nuestro país y la opción elegida por la mayoría de los ciudadanos para sus desplazamientos. Esta situación ha provocado, entre otras consecuencias, que la actividad del asfalto acabara el 2013 en mínimos históricos. Según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas (Asefma), durante el pasado año apenas se produ- jeron en nuestro país 13,24 millones de toneladas de asfalto, de las cuales 172.700 toneladas fueron de mezclas fabricadas en frío o templadas. De todas formas, todo parece indicar que la tendencia ha cambiado en la primera mitad de este año, ya que la licitación de obra por parte del Ministerio de Fomento para el mantenimiento y explotación de carreteras ha crecido notablemente, como confirmaba hace poco el secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Fo- mento, Manuel Niño. También ha supuesto un impulso para este sector la reactivación de las ‘operaciones asfalto’ en diferentes ciudades españolas, las cuales habían estado congeladas du- rante los últimos años por la política de contención presupuestaria. Es precisamente en este cambio de estrategia donde se explica, en parte, la subida de licitación de obra pública que se ha dado igualmente entre las administraciones locales en estos seis primeros meses, y que ha alcanzado el 42%. Este incremento de actividad parece que también está teniendo su incidencia en la venta de maquinaria nueva. Los datos de la Asociación Nacional de Distribuidores e Importadores de Maquinaria de Obras Públicas, Minería y Construcción (Andicop) co- rrespondientes al primer semestre del año hablan de una continuación de la tendencia ascendente que se inició durante el 2013. Siempre en niveles completamente dife- rentes a los registrados en tiempos anteriores a la crisis y teniendo en cuenta la imposibilidad de discernir en este estudio cuántas de esas nuevas máquinas salen al exterior, cuántas van a los parques de alquiler de los distribuidores y cuántas re- almente se usan en trabajos de obra pública y no en industria o agricultura, lo cierto es que las ventas de algunos productos, sobre todo los equipos compactos, han cogido impulso. Confiemos en que todos estos datos no sean un espejismo ni fruto de intereses elec- toralistas de cara a los próximos comicios locales y autonómicos, sino un cambio de tendencia sólido que marque la verdadera recuperación de un sector clave para la economía de nuestro país. editorial