41 SMOPYC La historia de Maquiobras se inicia en 1984. “Mi padre tenía anteriormente otra empresa, que cerró en 1982, y tras dos años involucrado en otro proyec- to, en 1984 tomó la decisión de crear su propia compañía como fabricante de encofrado y otros materiales para la construcción, especialmente transpaletas hidráulicas, pla- taformas de descarga y elevadores de fachada”, señala Javier Ferruz, gerente de Maquiobras. Aunque todos los inicios son complicados, en el caso de Maquiobras el que muchos de los antiguos clientes del fundador Félix Ferruz, le mostraran una gran fidelidad, confiando en su nuevo proyecto, facilitó mucho el arran- que de la compañía y sus primeros años de trabajo. La empresa fue creciendo progresivamente, en consonancia con la evolución que seguía en España el mercado inmo- biliario, hasta que en 1992 se vio afectada por la crisis económica general que atrapó a todo el país. Maquiobras se vio obligada a ajustar su tamaño a la nueva situación del mercado pero pronto recuperó la senda del crecimiento, hasta el punto de poder decir que desde 1993 hasta 2007 su expansión fue constante y progresiva. En el año 2000 emprende un ambicioso programa de in- versiones que tiene su máxima plasmación en la apertura, tres años después, de unas nuevas y modernas instala- ciones en Villanueva de Gállego (Zaragoza), de cerca de 20.000 m2 de superficie, las cuales no sólo les permite triplicar su capacidad productiva sino también ganar en espacio de almacenaje. Se equipa la nueva fábrica con los equipos de producción más modernos y, como prueba de su apuesta por la calidad, certifica su proceso de produc- ción con la ISO 9001-2000. “Las nuevas instalaciones también nos permitieron diver- sificar nuestros campos de trabajo. Hasta entonces, prác- ticamente el 100% de nuestra actividad estaba dirigida a la edificación y con la aparición de nuevos productos en nuestra gama también pudimos entrar en otros ámbitos como la obra pública: puentes, minipresas hidroelécticas, etc.”, indica Javier Ferruz. Como a la gran mayoría de las empresas vinculadas al sector de la construcción, finales de 2007 y principios de 2008 marcó el inicio de una nueva etapa en la trayectoria de Maquiobras, con una pérdida de peso en la facturación de las ventas en el mercado nacional y un incremento de Javier Ferruz, gerente de Maquiobras. la importancia de la exportación. De tal forma que a día de hoy, como confirma su gerente, el 80% de los ingre- sos proceden de las ventas al exterior y del restante 20% muchas son ventas a distribuidores nacionales que luego dan salida a estos equipos en otros países. “Por fortuna iniciamos la salida al exterior antes incluso de la irrupción de la crisis, siendo conscientes de que la bur- buja inmobiliaria, más tarde o más temprano, terminaría por pincharse. Bien es cierto que nunca llegamos a imagi- nar que fuera a ser una caída de mercado tan profunda y tan dilatada en el tiempo”, reconoce Javier Ferruz. Maquiobras inició la vía de la internacionalización por los países más cercanos geográficamente, especialmente Portugal, Marruecos y Argelia, y ha ido expandiendo su presencia a otras partes del mundo como Latinoamérica (en Cuba ha gozado tradicionalmente de una fuerte im- plantación), India o Arabia Saudí, entre otras. En este sen- panorama