48 ASFALTO borde del precipicio. Un sector que comenzó la crisis en valores de inversión en bienes de equipo cercanos a los 2.000 millones de euros y que generaba 30.000 puestos de trabajo directos y otros 30.000 indirectos, ha visto, seis años después, como han tenido que cerrar cerca del 40% de sus empresas, con una destrucción de empleo próxima al 55%. De acuerdo al último estudio de la Asociación Europea de Pavimentos de Asfalto (EAPA), correspondiente al 2012, mientras que España ocupaba el segundo puesto en fa- bricación de mezclas bituminosas en 2007, sólo por de- trás de Alemania, cinco años después había bajado en el ranking europeo hasta el sexto lugar, viéndose también superada por Turquía, Francia, Italia y Polonia. España, aun teniendo una mayor superficie geográfica que Ale- mania (504.782 km2 vs 357.021 km2) y una mayor red de carreteras (666.519 vs 644.258 km, según datos de 2009), presenta actualmente datos de producción de as- falto que son menos de la mitad que los registrados en el país germano. Nuestro país representa, por tanto, la cara más negativa en Europa en cuanto a la producción de mezclas bitumi- nosas, en claro contraste con Turquía donde este merca- do ha crecido cerca del 75% desde el año 2007, impulsado por el gran desarrollo que está experimentan- do aquel país en materia de infraestructuras. De izquierda a derecha: Juan Lazcano, presidente de la CNC, Manuel Niño, secretario de Estado de Infraestructuras, y Juan José Potti, presidente de Asefma, en la Asamblea General Ordinaria de Asefma. ¿Luz al final del túnel? De todas formas, desde Asefma se confía en que la caída de producción de asfalto en España ya haya tocado fondo en el 2013 y de hecho señalan que a lo largo de los últi- mos meses se han dado una serie de acontecimientos que hacen pronosticar un cambio de tendencia. En primer lugar, las beneficiosas consecuencias que ha tenido la puesta en marcha del Plan de pago a proveedores, el cual ha permitido aliviar la tesorería de muchas de las empre- sas que conforman este sector. Y en segundo término, el cambio de rumbo que parece haber dado el Gobierno en materia de licitación de obra pública desde el comien- zo de 2014. En enero, según confirma la Secretaría de Estado de Infraestructuras, el Gobierno licitó de una ta- cada 18 obras destinadas a la construcción y conserva- ción de carreteras por valor de 513,7 millones de euros (12 obras de nueva construcción y seis para rehabilitación de firmes), un hecho que no se había producido en los úl- timos cinco años. Es evidente que la reducción de gasto en España por parte de la administración pública en refuerzo de firmes no tiene parangón. Mientras que antes de la crisis se des- tinaban a estos trabajos partidas presupuestarias supe- riores a los 500 millones de euros en un solo año, en los últimos cinco se han licitado actuaciones de este tipo por un valor total de menos de 100 millones de euros. Eso, como se avisa desde Asefma, no sólo supone un grave panorama