44 FRACKING farmacéutica, automovilística, etc., los podemos encon- trar en salsas, maquillajes, antioxidantes, entre otros pro- ductos cotidianos. La EPA americana está realizando análisis a pie de pozo sobre la afección al agua potable, cuyas primeras conclu- siones y recomendaciones estarán disponibles en 2014. En cuanto al gas metano, no es venenoso pero debe vi- gilarse el riesgo de filtraciones a los acuíferos de abaste- cimiento durante la extracción. Como ejemplo, en Estados Unidos, la Agencia del Medio Ambiente identifi- có 18 casos de intrusión de metano en acuíferos, por lo que están elaborando una nueva normativa que garantice la estanqueidad. Radioactividad Y en cuanto a la radiactividad detectada en algunas aguas de retorno durante el proceso exploratorio, está totalmente probado que tiene origen en la fracturación hidráulica ya que ésta no utiliza ningún elemento radiac- tivo, como ocurre en algunos procesos industriales. Si se detecta radicación es natural e inherente a muchas formaciones pizarrosas. Aun así, en los casos detecta- dos en Norteamérica no llegó a valores mínimos para tomar precauciones fuera de la vigilancia permanente y la descontaminación periódica de los equipos. Episodios sísmicos En 2011, cerca de Blackpool, en una zona de baja sismici- dad, se registró un episodio sísmico de magnitud 2,3 de la escala Richter, mientras se realizaba una fracturación hi- dráulica en un pozo del entorno. El gobierno británico pro- hibió la fracturación hidráulica, mientras investigaba las causas y los expertos descubrieron la existencia de una falla no identificada en los estudios previos. En diciembre se han reanudado las operaciones tras establecer un procedimien- to preventivo a la sismicidad inducida y el ejecutivo británico ha declarado su apuesta por la extracción de gas no con- vencional y por liderar esta actividad en Europa. Uso del suelo El informe señala que la ocupación del suelo es uno de los focos de preocupación social (no de riesgo) pero que las referencias localizadas siempre en los mismos emplaza- mientos con un elevado número de pozos son una excep- ción. La ocupación del suelo en el gas no convencional es semejante a la del gas convencional, con la ventaja de que la perforación de pozos con una sección horizontal subte- rránea permite ubicar varios pozos desde un único empla- zamiento, minimizando el impacto y la afección a la población local (ruido, tráfico rodado y vías de acceso). Tra- ducido en cifras, un emplazamiento de 2,5 hectáreas o in- ferior, puede cubrir un área de explotación de más de 5 kilómetros cuadrados de superficie que no se ve. Marco regulatorio En los Estados Unidos el hecho de que el propietario de terreno sea también dueño de los recursos minerales que alberga su subsuelo ha contribuido de un modo relevante a la exploración y extracción de gas natural ya sea con- vencional o no. Este esquema permite una compensa- ción directa y relevante al dueño del terreno, incentiva el desarrollo local de la actividad y, en algunos casos favo- rece la apertura de un número excesivo de pozos para lo que debería ser una explotación racional del recurso. En España ni el titular del terreno ni las administraciones territoriales se benefician, algo que puede cambiar si pros- pera una resolución del Congreso de los Diputados (26-02- 12) que insta al Gobierno a estudiar “la implantación de un tributo que grave la extracción de hidrocarburos en territo- rio nacional, incluidas sus aguas territoriales, cuya recau- dación se podrá destinar a financiar aquellas Comunidades Autónomas y Entidades Locales de la región donde se pro- duzca la extracción”. tecnología