26 ENTREVISTA A la tremenda caída de actividad que se está dando en el sector de los áridos, ahora se suma otro proble- ma que acaban de dar a conocer al público, el de los robos. ¿Se ha agravado esta situación en estos últi- mos meses? En realidad es un problema que viene sufriendo el sector desde hace tiempo pero que ha ido a más en estos últi- mos años. De hecho, en la última Junta Directiva de la Federación de Áridos, fue sorprendente comprobar cómo de las empresas representadas en este órgano directivo, cerca del 80% han sufrido ya robos importantes en sus explotaciones. Para paliar este grave problema se nos ha pedido que hagamos una nueva acción ante las Adminis- traciones que ponga coto a esta situación. Y digo una nueva acción porque desde hace dos años, a través de la Federación y de sus asociaciones miembro, estamos manteniendo reuniones con las delegaciones y subdele- gaciones de gobierno para pedir el apoyo y los medios que garanticen un mayor control de las canteras. Entiendo, por lo que señala, que con la crisis el nú- mero de robos ha crecido... El problema es que ahora se juntan dos factores. Por un lado, las empresas tienen menos actividad, por lo que mucha de su maquinaria está parada en canteras, grave- ras, etc., y con menor vigilancia, lo que puede facilitar su sustracción. Y por otra parte, debido a la crisis, hay mayor necesidad por parte de determinados colectivos de bus- car ingresos a base de sustraer material ajeno. Con todo ello, desde la Federación consideramos que al- rededor de un 40% de las canteras españolas ha sufrido algún tipo de robo en los últimos años. Personalidades en el acto de inauguración en el III Congreso Nacional de Áridos, celebrado el pasado mes de octubre en Cáceres. ¿Hay regiones más afectadas que otras? No, la verdad es que es un problema generalizado como demuestra el porcentaje tan alto que le comentaba ante- riormente de empresas de la Junta Directiva (en ella están representadas las diferentes regiones de España) que se han visto afectadas por estos robos. ¿Tienen constancia de dónde acaba el material roba- do? ¿Se vende en España? ¿Sale a otros países? Hay dos tipos de material que se puede sustraer en una cantera. En primer lugar están los equipos móviles o fijos que pueden ser transportados en camión góndola o en piezas a terceros países donde hay menos control. A día de hoy no tenemos constancia de hacia dónde va ese trá- fico aunque sí tenemos claro que tendría que haber una mayor vigilancia en las aduanas. Y como segundo tipo de material susceptible de ser robado, que no es exclusivo de este sector, se engloba todo lo relacionado con el cable de cobre, los motores, las instalaciones eléctricas... Es un material que se puede revender más fácilmente a entida- des recicladoras y cuya trazabilidad resulta más difícil. ¿No han apreciado un mayor control en este último ámbito durante los últimos meses? Aunque es cierto que se han realizado recientemente al- gunas modificaciones legislativas para que los reciclado- res de metales tengan que identificar la procedencia de los materiales, sigue siendo un problema muy grave para nuestra industria. Porque ya no es sólo lo que vale el ma- terial sustraído, que los ladrones venden al peso o por piezas, sino que a esto hay que sumarle el enorme coste que supone tener la explotación parada durante la repa- ración de los desperfectos causados por el robo. ¿Hay un modus operandi generalizado para este tipo de robos? Como suele ocurrir en estos casos, lo normal es que se produzcan en fines de semana y durante la noche. Y sue- len ir precedidos de una previa observación de las insta- laciones, para estudiar cuándo están sin vigilancia. ¿Qué medidas proponen desde la Federación de Ári- dos para acabar con el problema de los robos? Le hemos pedido por escrito al Ministerio de Interior una reunión para solicitarle que se tengan más en cuenta las explotaciones de áridos y las instalaciones mineras en todas las acciones de vigilancia que realiza la Policía Na- cional y, especialmente, la Guardia Civil en los entornos panorama