Motorizar una persiana o toldo con las motorizaciones de Enjoy-Motors es una opción muy recomendable para mejorar la e ciencia energética de una vivienda. ECCN 106 Simples gestos, para un futuro mejor En la mejora de la e ciencia energética de las viviendas afectan un sinfín de factores y productos, desde la propia construcción de la misma hasta su orientación, entre otras opciones. En lo que respecta al sector de la ventana y la protección solar, las persianas y toldos constituyen una gran ayuda en la reduc- ción de la radiación solar que entra por las ventanas al interior de las casas y disminuir la temperatura en los meses calurosos y subirla en los meses más fríos del año. Se podría pensar que accio- nar las persianas de manera manual, supondría un mayor ahorro de energía (en este caso eléctrica) en comparación con, por ejemplo, el accionamiento motorizado de las mismas. Esta idea supone, sin embargo, un error que implica mayores consumos en la climatiza- ción de la vivienda. Motorizar una persiana aporta al usuario un alto grado de confort, además de contribuir al rendimiento energético de su casa. Los nue- vos motores radio de Enjoy-Motors para persianas, cuentan con 3 posiciones intermedias, lo que ofrece la posibilidad de posicionar la persiana en un punto tal que ventilación y luminosidad sean los más convenientes para el usuario. Para las persianas con lamas orienta- bles, Enjoy-Motors cuenta con motores que con un simple click, las lamas se abren y se pueden regular fácilmente. Sin embargo, para motorizar una persiana, Enjoy-Motors dispone de gran número de posibilidades de ‘automatización’, donde entran factores importantes en la e ciencia energética de las mismas. Enjoy-Motors propone el sensor de luminosidad para persianas S4Glass, con el que además de contar con un reloj programador que permite subir la persiana por la mañana a la hora deseada y bajarla completamente por la noche, es posible seccionar la persiana de manera automática en función de la luminosidad exterior (radiación solar). S4GLASS cuenta con una ventosa que se adhiere al vidrio de la ventana y mide la luminosidad de cada momento. Cuando ésta excede la programada, la persiana se baja hasta la posición en la que se encuentre el sensor, manteniéndose allí hasta que la luminosidad