había dado “pasos de gigante” en los últimos años para equiparse en stock y calidad con respecto a Europa aunque reconocía que “todavía hay mucho por hacer”. Una de las consultoras implicadas en el proyecto de catalo- gación de ACTE es BNP Paribas Real Estate. Precisamente su director nacional industrial y logístico asistente a la jornada, Jean Bernard Gaudin, aseguró que esta clasifica- ción ayudará a determinar el precio y mejorará “la puesta en el mercado”. Gaudin afirmaba que el valor de mercado del suelo no se basaba en otra cosa que no fuera la oferta y la demanda, adaptándose a lo que cada usuario pudiera pagar y sus necesidades: “Hay que definir una renta para cada profesión y de ahí fijar el valor del suelo”. Manel Torres, director gerente de Moldstock, añadió: “Quien pone el precio del suelo inmologístico es el cliente final”. Un hecho diferencial del mercado español con respecto a otros países de Europa, en el que la gran mayoría de los asistentes al networking coincidieron, es la dificultad normativa y el exceso de reglamentaciones que hay que hacer frente antes de desarrollar un proyecto de este tipo. El primero en mencionar el tema fue Isidre Gavín: “Otra causa que nos diferencia, y estoy contento de decirlo yo que represento la empresa pública, es que tenemos una regla- precios que se pagarán por ellas”. Añadió además que en mentación urbanística y medioambiental y unos requisitos otros países europeos, éstos varían según el proyecto que que parecen un castigo directo a nuestros desarrollos, cosa vayan a albergar, de la mano de obra que se emplee y de la que no pasa en otros países”, sentenció Isidre Gavín, direc- riqueza que vayan a generar. “La iniciativa pública debería tor general de Cimalsa. Víctor Estrada, director general de Estrada & Partners: “La iniciativa pública debería intervenir hasta cierto punto y regular para que el precio del suelo no sea el que cada uno quiera, adecuándolo al estándar europeo” Ramón Vázquez, presidente de ACTE, e Isidre Gavín, director general de Cimalsa. 8/ ser intervencionista hasta cierto punto y regular para que el valor de mercado del suelo no sea el que cada uno quiera, adecuándolo al estándar europeo”, puesto que, en España nadie regula los precios. Normas que castigan Por su parte, Gustavo Cardozo, en representación de Prolo- gis, dijo estar de acuerdo con la homologación pero, según su criterio, “el problema no es homologar o no las naves sino intentar ser más competitivos. Aquí hemos jugado con precios de suelo altísimos y una total disparidad de criterio al fijarlos”. Sin embargo, Cardozo reconocía que España Reportaje A la izquierda, Javier Giovanetti, director técnico y compras de STEF. A su lado, Gustavo Cardozo, en representación de UNO y Prologis.