LÁSER más extendidas en la industria de la telefonía y TV, lo que ha propiciado un aumento en las ventas del orden del 100% en los últimos dos años, pasando de 175 millones de dólares en 2015 a 356 millones de dólares en 2017 según datos de ‘Strategies Unlimited’. A nivel industrial, el láser es una herramienta flexible y amplia- mente utilizada en numerosas aplicaciones. Una manera de dividir los tipos de láseres a nivel industrial es en función de los tipos de aplicaciones, así, es posible diferenciar tres categorías distintas: los equipos principalmente empleados para operacio- nes de marcado y grabado, que generalmente utilizan láseres pulsados; los empleados para operaciones de micro-procesado, con fuentes de hasta 1.000 W; y los empleados en operaciones de macro-procesado, donde las fuentes empleadas son de más de 1.000 W. Dentro de las aplicaciones de marcado, habitualmente, se emplean fuentes de baja potencia, por debajo de 100 W, y generalmente, capaces de proporcionar pulsos de nanosegun- dos, es decir, 1x10-9 segundos. En la fabricación de componentes y equipos, de cara a una correcta identificación y trazabilidad es preciso identificar de manera unívoca todos y cada uno de los ele- mentos fabricados, el marcado láser posibilita marcar distintos materiales a velocidades que llegan a superar los 10.000 mm/s y que, en la mayoría de aplicaciones, no repercuten en el tiempo de producción, pudiendo llevar a cabo el marcado sin detener el movimiento de las piezas, lo que se conoce con el término de ‘Marking-on-the-fly’, y siendo posible además, recoger una deta- llada información en forma de códigos QR. A nivel de ventas, la necesidad de identificar y trazar de modo unívoco todos y cada uno de los componentes, así como la cada vez más creciente necesidad incorporar información detallada y personalizada de cada componente dentro de la Industria 4.0, ha repercutido positivamente en el aumento del número de ventas de estos equipos, pero manteniendo más o menos estable el volumen negocio, ya que, debido a la madurez alcanzada, los precios de dichos equipos se han visto sensiblemente reducidos en los últimos años, gracias también al aumento de la competencia con la aparición en el mer- cado de nuevas empresas dedicadas a la integración de células de marcado adaptadas a las necesidades de cada cliente. En función del material a mar- car, los equipos suelen utilizar láseres de fibra, CO2, diodo o algún medio de estado sólido distinto en aplicaciones concretas, si bien, prácticamente el 50% de las ventas se corresponde con los de fibra, principalmente para el marcado de materiales metálicos y poliméricos. En el marcado de materiales no-metálicos, al igual que sucede en aplicaciones de corte, el láser de CO2 sigue siendo la prin- cipal opción debido a la mayor absorción de energía que presentan dichos mate- riales a la longitud de onda de 10.600 nm frente a los 1.064 nm que emiten los de estado sólido de Nd:YAG de fibra y disco comercializados a nivel industrial. Absorción energética en función de la longitud de onda [1]. 35 Aplicaciones láser. Foto: Strategies Unlimited. Máquina A.T.L.A.S de GE. Foto: GE. INDUSTRIA AUTOMOCIÓN