TRIBUNA DE OPINIÓN 6 Si todavía no piensas a tan largo plazo, ten en cuenta que la integración del desarrollo de software y hardware puede tener un impacto rápido y significativo en tu resultado final están en la carretera o en el aire durante mucho más tiempo. El bombardero B52 ha volado durante más de 50 años y su software se actualiza cada pocos meses a lo largo de diferentes versiones de sistemas y electrónica. Puedes decepcionar a los clientes y arriesgarte a perderlos o actualizar el software en un coche mucho después de que la producción del hardware haya finalizado. Pero los problemas de software causados por esas actualizaciones podrían volverse en tu contra años después. O, en cambio, puedes aprovechar las actualizaciones de software para abordar otros problemas. GM fue capaz de utilizar una actualización de software para apagar automáticamente el motor del Chevy Volt cuando éste se encontraba inactivo durante mucho tiempo. De esta manera no solo se ahorraba gasolina y se evitaba que la batería se agotara, si no que también salvaba vidas puesto que, al ser el Volt tan silen- cioso, las personas se olvidaban de apagar su motor al aparcar, causando una acumulación de monóxido de carbono en su garaje. Hace una década, estos retos se podían solventar diseñando un producto y, después, desarrollando el software para alimentarlo o dejándolo en manos de otro departamento que se encargara de ello, ya que el software controlaba componentes aislados y discre- tos. Ahora que los sistemas electromecánicos están integrados e interconectados, esto ya no es sostenible; la integración debe empezar en las primeras etapas del diseño, cuando todavía se están reuniendo los requisitos. Es necesario combinar las regulaciones del sector, los requisitos del producto que, probablemente, ya se estén gestionando en un sistema PLM, y los diversos requisitos de hardware, software, electrónica y fabricación que estarán en distintas herramientas, incluyendo el ALM. Todos deben estar integrados y conectados con detalles de imple- mentación y resultados de pruebas y simulación. Combinar el ensayo de software y la simulación física puede reducir el número de proto- tipos físicos necesarios y puede evitar problemas caros y peligrosos. Tanto el sistema ALM como el PLM gestionan el cambio, y esa es una de las áreas más importantes a integrar, lo que significa entender claramente la relación entre los distintos módulos. Las necesidades de cambio durante el ciclo de desarrollo del producto deben ser ana- lizadas para conocer su impacto en los componentes de software y hardware, y la implementación debe ser coordinada entre los equipos para agilizar las operaciones. Diferencias menores en el hardware pueden afectar significativamente al funcionamiento del software y, a su vez, el software tendrá distintas capacidades en función de la con- figuración de la plataforma de hardware, así que hay que ser capaz de garantizar la combinación correcta de software y hardware. La trazabilidad a lo largo de los diferentes sistemas, remontándose hasta las fuentes de datos, es clave para gestionar las dependencias, para producir listas precisas de materiales y para entender por qué se tomaron las decisiones que se tomaron o cómo y porqué surgieron los problemas. Los desarrolladores de software e ingenieros de producto no quieren aprender nuevas aplicaciones para hacer su trabajo y, desde luego, no quieren un único sistema que no encaje con sus diferentes nece- sidades y costumbres. Estos profesionales deben poder tener toda la información que necesiten para trabajar de forma productiva en el entorno en el que se sienten cómodos. A medida que avanzamos hacia un mundo de personalización masiva, impulsado hacia la fabricación aditiva como la impresión en 3D, será fundamental monitorizar la combinación exacta de componentes de hardware y software en un mismo producto. El prototipado rápido se convertirá en la norma, acortando el ciclo de desarrollo del hardware. Estas tendencias harán que la integración del desarrollo de software y hardware con herramientas como el Gemelo Digital sea todavía más importante. Un gemelo digital de los componentes físicos que se integre con herramientas de gestión de software proporcionará una versión viva de los productos, lo que puede hacer que la producción y el soporte sean mucho más flexibles y sensibles. Pero esto solo funcionará con herramientas que puedan trabajar conjuntamente. Si todavía no piensas a tan largo plazo, ten en cuenta que la integración del desarrollo de software y hardware puede tener un impacto rápido y significativo en tu resultado final. Por ejemplo, Ford ha sido capaz de actualizar las unidades de control electrónico con problemas de software en lugar de reemplazar el hardware, gracias a que controla perfectamente qué componentes de hardware y software se utilizan en una determinada variante o serie de programas de vehículos en cada zona en todo el mundo, incluso hasta el número de identificación de un vehículo en particular. Durante tres años, esta capacidad ha ahorrado a la compañía 100 millones de dólares en costes de garan- tías: una gran recompensa para un sistema que también mejora la satisfacción del cliente. • Las necesidades de cambio durante el ciclo de desarrollo del producto deben ser analizadas para conocer su impacto en los componentes de software y hardware, y la implementación debe ser coordinada entre los equipos para agilizar las operaciones.