Aidimme nombra presidente del Instituto Tecnológico a Fernando Saludes, actual presidente de REDIT La Asamblea General del Instituto Tecnológico Metalmecánico, Mueble, Madera, Embalaje y Afines, Aidimme, eligió el pasado 29 de marzo al empre- sario Fernando Saludes como nuevo presidente de la entidad. Fernando Saludes es, a su vez, presidente de la Red de Institutos Tecnológicos de la Comunidad Valenciana, Redit, desde 2016. Por su parte, Francisco Javier García ha revalidado su cargo en la vicepresidencia del Centro Tecnológico. Esta renovación de cargos se produce transcurridos los 2 años del pro- ceso de fusión iniciado en 2015, cuando Aidima y Aimme unificaron sus estruc- turas en el nuevo Instituto Tecnológico Aidimme. El Consejo Rector de Aidimme queda con gurado con la presidencia que ocupa Fernando Saludes, la vicepresiden- cia que revalida Francisco Javier García, la secretaría que ocupa Vicente Folgado, y por 6 vocalías permanentes, una de las cuales la ocupa el Ivace en la persona de su directora general, Jùlia Company, estando ostentadas el resto por las patronales Fevama, Femeval y Fempa, además de 19 vocalías, destacando la incorporación de Soledat Berbegal de ACTIU, y Ma Eugenia García de Micuna, y 2 vocalías más designadas por el presidente. editorial La madera recupera su protagonismo A lo largo de la Historia hemos vivido diversas Revoluciones Industriales, tres en concreto, que han supuesto cambios disruptivos en la manera de hacer y entender los procesos de producción. En la actualidad estamos inmersos en la cuarta Revolución Industrial, también conocida como Industria 4.0: una agrupación de propuestas de mejoras tecnológicas aplicadas a la industria y cuyo objetivo es optimizar procesos productivos e incrementar la flexibilidad y la producción a través de las nuevas herramientas informáticas. Sin embargo -y aunque la madera, históricamente, siempre ha estado presente en la construcción gracias a sus idóneas propiedades en aplicaciones estructurales y por ser capaz de satisfacer las necesidades de cerramiento, tanto en fachadas como en cubiertas-, los cambios motivados por la aparición de nuevos materiales constructivos, han dado lugar al declive de la madera en favor de otros materiales como el vidrio, el acero o el hormigón. Pero en toda revolución surgen cambios que provocan la aparición -o re-aparición- de nuevos materiales, procesos, herramientas y conceptos. Y en la actual revolución industrial la eficiencia energética, la sostenibilidad o el respeto por el medio ambiente son criterios ineludibles para todas las industrias, tanto a nivel nacional como internacional, que quieran seguir siendo competitivas y cumplir con los objetivos marcados a nivel europeo en la Estrategia 2020: una agenda de crecimiento y empleo de la Unión Europea que pretende impulsar el crecimiento inteligente, sostenible e integrador como manera de superar las deficiencias estructurales de la economía europea, mejorar su competitividad y productividad y sustentar una economía social de mercado. Estas características son inherentes a la madera, que cuenta con cualidades que facilitan su uso en la edificación. Esas cualidades son las que están sustentando el incremento del uso de este material en la construcción. La madera permite correcciones en la obra y en ella se pueden aplicar gran cantidad de técnicas y tratamientos, incrementando así sus aplicaciones. Además, es de los pocos materiales que, a nivel estructural, puede entrar en carga junto al acero, sin necesidad de recurrir a encofrados. Asimismo, es un material que permite realizar labores de construcción en seco. No obstante, como bien saben nuestros lectores, la principal cualidad sobre la que se está apoyando este redescubrimiento de la madera es su sostenibilidad, sus propiedades medioambientales. Tal y como señaló David Baena, arquitecto y consejero delegado de BCQ Arquitectura, en el marco de Architect@Work Barcelona, evento en el que Interempresas estuvo presente, “el principal motivo que justifica este furor actual de la madera es su respeto por el medio ambiente al ser un material que no exige grandes consumos de energía para su producción. Además, es un material renovable, reciclable y reutilizable. En definitiva, es un material con el que, si nos ponemos a analizar, se puede hacer absolutamente de todo, desde la estructura, los cerramientos, los acabados... De alguna manera, es un material maravilloso”. La madera, como material constructivo, ha sufrido idas y venidas, pero al final siempre vuelve, y parece que esta vez ha sido para quedarse. Conocedores de todos estos beneficios medioambientales y también de confort que aporta este material, desde Interempresas Industria de la Madera seguimos haciendo hincapié en su utilización como material constructivo. De hecho, en este número de la revista se pueden contemplar varios ejemplos que muestran diferentes construcciones actuales en madera y las ventajas que ha propiciado la utilización de este material constructivo tanto para sus habitantes como para el medio ambiente.