TORNEADO 88 Gráfica 1. Desgate de las herramientas en AISI 304-L. Figura 2. Media de las fuerzas durante el proceso de corte. Como se puede observar en la gráfica 1, el inserto con rompevirutas se ha desga- tado más lentamente que el inserto base. El fin del ensayo para las dos herramientas ha sido por superar el desgate de notch medio recomendado por la norma ISO 3685: 1993. Dicho desgate causó la rotura del filo principal en la herramienta con rompevirutas. En la gráfica se representa el desgaste de flanco medio. En cuanto a las fuerzas de corte originadas durante el proceso de mecanizado, se puede ver en la figura 2 que la fuerza en el eje X, fuerza de avance en este caso, es menor cuando se mecaniza con el inserto con rompevirutas. Las fuerzas en las otras dos direcciones son muy parecidas de rompevirutas a sin él. Esto ocurre tanto con la fuerza media como con la fuerza máxima en cada uno de los ejes y en la fuerza módulo resultante del proceso. Además, el incluir un rompevirutas al inserto cerá- mico, reduce la fuerza total del mecanizado en, aproximadamente, un 14%. Esto implica que el rompevirutas favorece el deslizamiento de la viruta generándose con ello un menor rozamiento entre viruta y herramienta tal y como se puede apreciar claramente mirando la fuerza en el eje X. Bajo estas condiciones de corte, la herramienta sin rompevirutas ha mecanizado un total de 6,57 cm3, mientras que el inserto con rompevirutas ha logrado arrancar 19,71 cm3 de material. Esto implica que al añadir el rompevirutas a la herramienta,