47 MECANIZADO La tecnología de fibra óptica empezó a popularizarse a finales de la década de 1990, cuando la demanda de más ancho de banda para las comunicaciones creció exponencialmente. Los motivos fueron el aumento del uso de internet y la comercialización de diversos servicios que necesitan mucha banda ancha, como el vídeo a demanda. En 2014, la expansión de esta tecnología asombrosa no muestra señales de abatimiento, ya que la demanda sigue ascendiendo debido al enorme tráfico de vídeo por internet, las necesidades del sector financiero para reali- zar transacciones cada vez más rápidas y la popularización de los teléfonos móviles, que, por su diseño, deben estar conectados a líneas de telefonía fija. La situación no puede favorecer más a Year Round Tech- nology Corp, una empresa de fundición con sede en el distrito de Wugu, en Taipei (Taiwán), que está creciendo a pasos agigantados. Como tantas otras empresas de éxito, en la expansión de Year Round también hubo algo de buena suerte. “Entramos en el mercado de la fibra óptica porque al- guien nos encontró por casualidad”, admite Jean Kuo, di- rector comercial de la empresa. “Nuestro cliente empezó a crecer muy rápido y, antes de que nos diéramos cuenta, estábamos haciendo cada vez más trabajo para ellos. Tu- vimos mucha suerte de empezar en el negocio de la fibra óptica al principio de todo porque ahora conocemos bien las necesidades y las expectativas del cliente”. El cliente en cuestión es una empresa estadounidense que, desde unos orígenes humildes, fue creciendo hasta convertirse en el mayor proveedor de componentes y subsistemas de comunicación óptica del mundo, con una plantilla internacional de doce mil trabajadores. Los pro- ductos de la empresa permiten realizar comunicaciones de alta velocidad de voz, vídeo y datos para aplicaciones de redes, almacenamiento, comunicación inalámbrica y televisión por cable. Para Year Round, la expansión de su cliente supuso que en 2008 el fabricante taiwanés abriera una segunda sede, que le ha llevado a triplicar la producción. En la actualidad, los encargos relacionados con la fibra óptica de la empre- sa —que cuenta con cuatro centros de mecanizado ver- tical Haas y dos centros de taladrado/roscado Haas DT-1— representan alrededor del 70% de su facturación. Jean Kuo comenta que “desde la instalación de las máquinas Haas, han estado funcionando 10 horas diarias sin problemas”. Uno de los principales componentes de fibra óptica fabri- cados por Year Round es la carcasa del módulo que ge- nera la luz. Estos módulos, que son del tamaño de una mano aproximadamente, se emplean en grandes siste- mas para servidores de fibra óptica y comunicación de datos. Entre los usuarios finales de estos sistemas, se hallan grandes multinacionales como Cisco y Microsoft. “La carcasa debe cumplir una tolerancia muy precisa de 25 μm, en gran medida por la transmisión de la fibra”, dice Jean Kuo. “Si hay desviaciones, el rendimiento se ve afectado. Además, la carcasa debe tener un acabado exterior estéticamente agradable”. Aunque Year Round se especializó en fundiciones de zinc en sus inicios en 1980, hace cinco años, la industria de la fibra óptica empezó a adoptar el aluminio fundido porque es más ligero y presenta mejores propiedades termodi- námicas. Sin embargo, el inconveniente del aluminio es que necesita más trabajo de mecanizado después de la fundición. Year Round comenzó a usar aluminio fundido en 2009 y al principio subcontrató la segunda operación de mecani- zado. No obstante, la empresa pronto empezó a sufrir uno de los mayores problemas de la externalización: el control de calidad. panorama