72 MECANIZADO “El proceso da comienzo cuando uno de nuestros cen- tros auditivos nos envía la muestra anatómica del cliente", cuenta Sergio Pavón, del departamento de I+D. “Se trata de una reproducción negativa en 3D del canal auditivo que se realiza con una silicona especial. A continuación, escaneamos la muestra anatómica y obtenemos un ar- chivo tridimensional en el sistema de diseño CADCAM, que utilizamos posteriormente para programar el meca- nizado en la Haas. Con esta máquina, pasamos del pedido a la entrega del dispositivo a medida en un plazo de entre tres y cuatro días. Ahora podemos controlar todo el pro- ceso de fabricación.” “Hace años, cuando no existía la tecnología de fabrica- ción informatizada, podíamos saber qué artesano había hecho el audífono”, continúa Sergio Pavón. “Ahora, la im- presión tridimensional ayuda a estandarizar el aspecto final de los instrumentos auditivos, lo que mejora la cali- dad y reduce la cantidad de mermas.” “Instalamos la Haas en 2013. El objetivo inicial era adqui- rir una máquina de calidad que fuera precisa y fácil de usar. Es sencilla e intuitiva, lo que permite implantarla muy rápidamente; no hace falta una formación larga para convertirse en un maquinista competente. La velocidad y la precisión son excelentes, así como la versatilidad, ya que es muy fácil cambiar de aplicación.” Aunque la VF2-SS se utiliza para muchas tareas diarias de mecanización de componentes –como cortar acero, alu- minio y plástico–, sobre todo se usa para mecanizar mol- des. Estos luego se emplean para producir piezas muy delicadas y pequeñas de los audífonos, mediante tanto máquinas de inyección tradicionales como máquinas de inyección por ultrasonidos, que no usan calor. La máquina de inyección por ultrasonidos de diseño especial no usa calor El método de ultrasonidos se adoptó para producir una pieza de plástico circular y diminuta que tiene una malla que hace de membrana y se estira por toda la zona del micrófono del audífono con el objetivo de evitar la entrada del viento, el agua y el polvo. “Para fabricar esta clase de componentes, necesitamos un plástico muy caro”, con- tinúa Pavón. “Debe ser no alergénico y cumplir con la nor- mativa de productos sanitarios. El moldeado tradicional genera muchas mermas, ya que el calor empleado en el proceso estropea las piezas.” Con la máquina de ultrasonidos de diseño especial de la empresa, no se usa calor. En lugar de eso, un electrodo vibra treinta mil veces por segundo para licuar la resina. La empresa utiliza esta máquina para desarrollar y produ- cir el molde y el filtro del canal auditivo interno. Los elec- trodos que se emplean en la máquina de ultrasonidos también se mecanizan con la VF2-SS, que utilizan en dos turnos y funciona desatendida gran parte del tiempo. Iván Jiménez, responsable del laboratorio mecánico, nos cuenta el proceso de selección que siguió Gaes para ele- gir la marca y el modelo de máquina. “Cuando buscába- mos la máquina, lo primero que hicimos fue un informe de verificación, en el que el proveedor, en este caso Haas, debía rellenar un cuestionario sobre los requisitos que debía tener la máquina”, cuenta Jiménez. “Con este método de evaluación, preparamos una hoja de cálculo en la que valoramos cada máquina. Este proceso conti- núa hasta que estamos seguros de que la decisión de compra se basa en factores totalmente objetivos –como las rpm, la potencia, la precisión y la repetibilidad– en lugar de en factores subjetivos como puede ser el aspec- to visual.” “De hecho, fue una decisión bastante difícil”, añade Lluís Gómez, director del producto Microson. “La razón princi- pal fue la relación calidad-precio, aunque la fecha de en- trega también fue un motivo muy importante. Estamos muy satisfechos con la tecnología Haas, que nos ha per- mitido acelerar el proceso de mecanización de piezas de- licadas y de alta precisión.” En 2008 falleció el fundador de Gaes, Juan Gassó. En el momento de su muerte, la empresa había abierto más de quinientos centros auditivos en todo el mundo. Gaes cuenta con oficinas en Portugal, Turquía, Chile y Argenti- na, y sirve a más de quinientos mil clientes. El éxito de la empresa se debe en gran medida al empeño y la fe en la tecnología de su fundador incansable. Los productos de Gaes son hoy dispositivos digitales discretos que ayudan a más personas que nunca a tener una mejor calidad de vida y a sentirse más seguras y contentas. Un legado im- presionante para aquel vendedor que empezó su negocio subido a una pequeña motocicleta de color verde. I panorama