50 ENTREVISTA A su juicio, ¿a qué retos se enfrenta el sector en la actualidad en nuestro país? No digo nada nuevo pues es común a todas las ac- tividades industriales, pero el gran reto es mantener nuestra independencia respecto a los intereses eco- nómicos de las grandes multinacionales, con su tác- tica de imposición de su fuerza económica en todas las situaciones, dando como realidad su interpreta- ción distorsionada, incluso intentando influir en la normativa. ¿Y en cuanto a retos técnicos? El desarrollo de dispositivos totalmente adaptados a las máquinas que reduzcan los riesgos, añadiendo ventajas para el funcionamiento de la propia máquina. Esto es posible cuando se integra el diseño de la se- guridad en el diseño de las máquinas, y está muy relacio- nado con la evolución de todas las tecnologías. Por la ve- locidad a la que se están desarrollando todos los campos de la ciencia, este reto tiene bastantes probabilidades de ser superado. ¿Qué le pide hoy el cliente a un dispositivo o una so- lución de seguridad? El cliente pide cumplimiento de normativa y certificación (lógicamente, la inspección laboral está realizando mu- chas actas cada año). Pero es una lástima que el cliente no valore la facilidad de mantenimiento que tienen nues- tros productos. En general, los costes de mantenimiento no parecen estar debidamente considerados en las em- presas. Este argumento es uno de los factores más ren- tables a medio y largo plazo de una instalación, y no hablo sólo de seguridad en máquinas. ¿Cuál es el aspecto más conflictivo o dificultoso a la hora de abordar una solución integral de seguridad? Primero, la comunicación. Cuando vamos a diseñar la se- guridad de una máquina, si la persona que sabe lo que se necesita saber sobre el uso y mantenimiento de la máqui- na no participa (o no se consigue que diga lo que sabe), el análisis cojea y el diseño es erróneo. Esto siempre tiene como primera consecuencia un coste más elevado de la solución correcta, pero lo peor es que puede derivar en un accidente. Para conseguirlo no existe nada nuevo. ¿Qué se necesita? Debe generarse la confianza suficiente para que los cono- cimientos de la máquina se transmitan al especialista en Procedimiento de adecuación de máquinas. seguridad, y, para que, a su vez, los conocimientos del ase- sor sean asimilados por el que conoce la máquina. Todos nuestros trabajos de diseño de seguridad en máquinas se basan en la premisa de formar equipo con todas las per- sonas involucradas con la máquina: desde el operador hasta el personal de mantenimiento, incluyendo todas los que conozcan la máquina desde sus distintos ángulos. ¿Qué otros puntos destacaría? La adaptación de los operarios a los sistemas de seguri- dad. Tras la adecuación de las máquinas al R.D.1215/1997 —e incluso antes— es común observar por parte de al- gunas personas un rechazo a las nuevas medidas de se- guridad, ya que modifican la relación habitual del hombre con la máquina. Cuando se trata de una simple modificación de costum- bres, la adaptación suele ser rápida y sin problemas. Los problemas vienen cuando la adecuación de la seguridad implica la pérdida de una funcionalidad de la máquina. Es el caso de las operaciones manuales y/o artesanales que se venían realizando con un alto riesgo pero sin historial de accidentes. ¿Qué se hace en estos casos? Deben tomarse decisiones apoyadas por estudios como nuestros Informes de Adecuación, que aportan los argu- mentos objetivos para determinar las condiciones en las que se pueden realizar estas operaciones de riesgo es- pecialmente alto. Aunque los factores que contribuyen a la adaptación del personal a las máquinas adecuadas son complejos, por nuestra parte incluimos entre las condi- ciones imprescindibles de diseño de cualquier sistema de seguridad su facilidad de uso. I panorama