76 RECTIFICADO lución industrial de aplicación de mínima cantidad de lu- bricante (MQL). En estos procesos, se alcanzan elevadas temperaturas y la fricción gobierna el mecanismo de eli- minación de material. Como consecuencia de esto, se tiene que evacuar una gran cantidad de calor generado, ya que en caso de no hacerlo se puede producir dañado térmico de la pieza, un desgaste de muela elevado o de- formaciones térmicas que resultan en una baja calidad de los componentes rectificados [8]. Además de las tecnologías que conducen hacia la reduc- ción o eliminación del refrigerante, existe una segunda línea de trabajo en torno a la optimización de aplicación de condiciones de refrigeración tradicionales. Esta línea aborda aspectos que se consideran críticos para maximi- zar el caudal de refrigerante útil (caudal que penetra en la zona de contacto muela rectificadora-pieza y que es real- mente efectivo en las funciones de lubricación y extrac- ción de calor de esta zona). Entre estos factores se encuentran el tipo geometría y posicionamiento de las to- beras, la velocidad y coherencia de los chorros, el empleo de rascadores y el tipo de lubricante utilizado [9]. Trabajos previos en la década de los 80 [10] estimaban valores de caudal útil entre 20 y 40 del caudal total em- pleado; sin embargo, estos valores parecen estar sobres- timados según el trabajo posterior de Engineer et al. [11], que fija los valores en un rango de 5-20 % del caudal total. La influencia del posicionamiento de la tobera y el efecto de la capa de aire que rodea a la muela han sido entre otros estudiados en [12]. Webster [13] afirma que para garantizar que el refrigerante llegue a la muela, la veloci- dad del flujo debe ser la misma que la de la muela, dando así importancia a la velocidad y coherencia del chorro em- pleado. Realiza una definición y presenta una expresión para el cálculo de lo que denomina longitud coherente y diseña una forma de tobera optimizada, basada en los di- seños de Rouse de toberas para bomberos realizadas en los años 40. En un trabajo más reciente, Morgan et al. [14] utilizan la mecánica de fluidos computacional y técnicas experimen- tales para mostrar que el máximo caudal útil alcanzable depende de las características de la muela rectificadora y los parámetros de proceso (porosidad, velocidad de muela) y que el alcance real del mismo depende de la po- sición de la tobera, su diseño, caudal y velocidad del cho- rro. Entre los diferentes diseños analizados, la mejor co- herencia se puede encontrar con la tobera de Rouse/Webster [13]. En cuanto a las necesidades de ve- locidad del chorro para penetración en la capa de aire afir- man que la velocidad debe ser entre el 80 y el 100% de la velocidad tangencial de la muela. Se puede afirmar que se ha generado gran conocimiento en este entorno y que en bibliografía están documenta- das ciertas bases sobre la definición de condiciones de refrigeración [8]. Sin embargo, se aprecia también que en la práctica aún existe una gran incertidumbre y disparidad de opiniones a la hora de establecer las necesidades del caudal, velocidad y orientación del chorro de refrigerante para una determinada aplicación, o sobre los efectos re- ales de utilización de rascadores y toberas de zapata. En el entorno industrial cada vez se aprecia una mayor con- cienciación sobre la importancia del empleo de unas con- diciones de refrigeración idóneas, pero las condiciones de refrigeración y limpieza de muela habitualmente utili- zadas distan de ser óptimas o eficientes. El presente tra- bajo se centra en este entorno, donde a través de un trabajo teórico y experimental se aclaran algunas de estas incertidumbres existentes y se establecen pautas para in- crementar la productividad y eficiencia en operaciones de rectificado mediante la aplicación de condiciones óptimas de refrigeración y el empleo de boquillas eficientes. tecnología