99 I+D+I cuestadas, su nivel de financiación se mantiene estable (44,6%), e incluso está creciendo (33,6%). Si profundizamos en el análisis de los datos del Baróme- tro, vemos que también existe distancia en cuanto a los valores de las prioridades estratégicas de las empresas. Para el 24% de las españolas, la prioridad es la innova- ción, frente al 37% del resto de encuestadas, seguido de la reducción de costes globales (18% para las españolas frente al 12%), y en tercer lugar el desarrollo internacional (13% para las españolas frente al 12%). Existe sin embargo unanimidad en cómo están financian- do el I+D: en mayor cuantía con fondos propios (el 57% de las españolas frente al 53% del resto de países), se- guido de fondos públicos (el 25% de las españolas frente al 55% del resto de países). Ahora bien, el impacto de la financiación externa en las empresas españolas ha sido menor que en el resto de países: El 27% de las empresas españolas aumentó el volumen de negocio en nuevas ofertas frente al 59% en el resto de países; el 19% de las españolas aumentó el número de innovaciones que llegan al mercado, frente al 60% en el resto de países; el 18% aumentó el trabajo de I+D, frente al 40% en el resto de países, y un 20% aumentó los acuerdos para la I+D. En cuanto al principal recurso externo utilizado para finan- ciar la I+D, las empresas españolas coinciden con las del resto de países encuestados: las deducciones fiscales. El 58% de todos los encuestados las utilizan y el 18% se ha deducido por primera vez. En España, el 55% de las em- presas encuestadas las utilizan. Los obstáculos para su mayor uso son también parecidos en todos los países en- cuestados: actividades no deducibles (25% en España y panorama