131 TRATAMIENTO ción máxima de 0,1 mm (alrededor 0,004 – 0,010 pulga- das).La precisión requerida hace que la calibración y me- dición manual sea muy difícil y lleve tiempo, especialmente para el proceso de los blisk ensambla- dos, componentes que a menudo consisten en múlti- ples blisks. Precisión absoluta con un software de medición hecho a medida Tras un cuidadoso análisis de todos los de equipos de la competencia, el cliente eligió el sistema de granallado totalmente automático KU 40 de Rösler. Un factor clave para la decisión del cliente era que los especialistas de Rösler podían ofrecer un sistema que permitiese una medición y calibración de las boquillas de chorro prácti- camente automática. El software necesario se ha des- arrollado en colaboración con una empresa de automatización, y, al mismo tiempo, el software de con- trol para los robots ha sido optimizado para esta sofisti- cada aplicación de peening. Los componentes a chorrear consisten en diferentes tipos de conjuntos de blisks con cantidades variables de álabes de la turbina y en posiciones diferentes. Después de haber colocado el conjunto de blisks en un soporte especial, el operario alinea el montaje y los bloquea. En- tonces el operario monta los sistemas de medición sobre los dos robots y se inicia el ciclo de trabajo. A fin de lograr una precisión absoluta y evitar colisiones, los robots no solo deben tomar las lecturas de la distancia del soporte de la pieza de trabajo y el componente real, sino que también debe alinearse. Para este propósito, se montaron unos sensores especiales en la parte infe- rior de la mesa giratoria. Una vez que las tres medidas de la posición del componente se han definido exacta- mente, el operario retira los instrumentos de medición de los robots. Los álabes son chorreados con las boquillas haciendo movimientos especiales, programados individualmente. Para este proceso de chorreado especial, la presión de tecnología