RECUADRO 2 medida: su obligatoriedad. A través del CNTC, las principales asociaciones de transporte han hecho llegar a Fomento que una medida de estas características nunca puede ser obligatoria, siempre será voluntaria y si, además, se compensa a los transportistas con descuentos en el precio del peaje. Aspecto, este último, que sí contempla la Ley que quiere introducir el Ministerio de Fomento, pero que no ha servido para convencer al conjunto del sector, que sigue demandando su carácter voluntario. Si bien, a pesar de que en aquellos tramos, donde se realice un desvío obligatorio, los transportistas tendrán una bonificación del 50% sobre el peaje a abonar, éstos no están convenci- dos de que ello les aporte beneficios económicos. Dicho de otro modo, los menos kilómetros recorri- dos e, incluso, el menor tiempo que tardarán en realizar el recorrido no equivale al coste del peaje. De igual modo no convence la otra medida que plantea Fomento. Por un lado, la bonificación del 35% a los vehículos pesados que ya circulan por la autopista de peaje y lo vayan a seguir haciendo por el tramo afectado. Todas las bonificaciones serán aplicadas durante todo el tiempo que dure la obligación del desvío. Eso sí, para disfrutar de estos descuentos será imprescindible la utilización de un sistema dinámico para el pago del peaje, algo que tampoco convence al sector. Un sector que vuelve a ratificar su sensibilidad con la seguridad vial, como lo demuestran las bajas cifras de siniestralidad que mantiene desde hace muchos años, puntualiza en su comunicado CETM. Concienciación que ha motivado que, vía CNTC, se exija a Fomento un estudio riguroso de la incidencia real de los vehículos de transporte en las carreteras. Para ello, será necesario analizar en profundidad aspectos tan importantes como el cálculo de la intensidad media de diaria, IMD, del tráfico de camiones en los tramos a prohibir, identificación de infraestructuras inadecuadas e insuficientes, eliminación de puntos negros y cuellos de botella o la reducción de las restriccio- nes al tráfico de camiones, entre otros. En definitiva, estamos ante una propuesta, de nuevo muy polémica, que el sector no está dispuesto a aceptar al menos en los términos que plantea el Ministerio de Fomento. Abierto a la negociación ha dejado muy claro que no aceptará ni la obligatoriedad –estaría dispuesto a asumirla, siempre y cuando sea voluntario- ni el abono del porcentaje que desea Fomento. Es más, desde algunos ámbitos se asegura que sólo lo aceptarían si fuera totalmente obligatorio. Tampoco aceptan la idea de que significa un mayor ahorro de costes. Lejos de esa reducción del 13% que alega Fomento, para el sector esto implicará un incremento de sus costes de explotación, que trasvasarán al precio del servicio. Edi Cobas 8 manutencion & almacenaje 504 Actualidad