anchuras de 800, 1.000 o 1.200 Mm. En casos especiales se pueden poner tres transportadores, pero solamente para palés de 800 mm. En el muelle, se instalan también transportadores de rodillos. Si bien ya estamos llegando a un alto nivel de transparencia, sin embargo, en el futuro, gracias a un etiquetado mucho más extendido en cada producto que forme parte de un envío. Los minúsculos sensores incorporados permitirán un grado sin precedentes de seguimiento y localización en tiempo real. De hecho, ya actualmente, FedEx ofrece un dispositivo multisensor algo más grande para envíos de gran valor, el denominado SenseAware, que se puede utilizar en todos los medios de transporte, incluidos aviones, dentro de EE UU y en más de una docena de destinos internacionales. En 2033, los sensores estarán omnipresentes y la cadena de suministro podrá estar optimizada en todas sus fases y personalizada a escala individual. Cada individuo, podrá tener acceso a una torre de control personalizada, un centro de mando para cada envío en la palma de la mano, ya sea mediante un smartphone, una tableta o cualquier otro dispositivo. Hoy por hoy, muchas grandes empresas ya cuentan con equipos encargados de gestionar «torres de control» para supervisar los problemas que puedan surgir en la cadena de suministro, ya sean debidos a situaciones climatológicas, fallos mecánicos o, por qué no, por disturbios sociales. En 20 años, algoritmos cada más avanzados “En tan solo 20 años, la cadena de suministro del futuro estará mucho más pulida y será mucho más accesible, fiable, sostenible y rentable que nunca.” frente a los gastos, generando opcio- nes globales para desviar un envío, acelerarlo o ralentizarlo. Este nivel de información también acarreará una mayor seguridad a lo largo de toda la cadena de suminis- tro; ya que tener la capacidad de conocer tanto el estado de un envío, como la ubicación de una remesa de lavavajillas o la temperatura de una entrega de tejido humano, con mayor certeza si cabe; simplifica la cadena de suministro. En cierto modo, la posibilidad de tener una visión global de 360o de un viaje allana el camino; facilita la visibilidad incluso de las rutas más complejas; genera eficiencia; reduce gastos y, básicamente, genera confianza en torno a la llegada a tiempo y de forma segura de los envíos. Aumentan las opciones en la consolidación de la mercancía Esta flexibilidad se extenderá igual- mente a un aspecto muy apreciado de la cadena de suministro: la con- solidación. En 2013, la mayoría de los envíos se consolidan y se introducen en contenedores en la bodega de un avión, el casco de un barco o en el interior de un camión. En 2033, el abanico de posibilidades incor- poradas en la cadena de suministro incluirá también la desconsolidación, lo que permitirá retirar una parte, incluso un único artículo, de un envío ya consolidado. Esto permitirá, por supuesto con un coste, agilizar la adaptación y entrega, por ejemplo, de una máquina de diálisis personal que ha sido enviada desde Vietnam al Puerto de Los Ángeles para un pa- ciente de Kansas City que la precise urgentemente. En lugar de enviarla a través de docenas de dispositivos hasta un camión a su llegada a Esta- dos Unidos, se tendrán más opciones para retirarla del envío global y enviarla por separado, por ejemplo, por transporte aéreo urgente, de un día para otro. Sin embargo, con el tiempo, se irán incorporando distintos tipos de consolidación a la cadena de suministro. El proceso de fabricación de, por ejemplo, esa misma máquina de diálisis personalizada, se fusionará con su envío y retirada al final de su vida útil. Al fabricar un producto, el proceso para determinar su destino final se codificará en el propio analizarán constantemente, para cada uno de nosotros, la velocidad producto. El pedido de un disposi- tivo realizado en Kansas City podría conectar de forma instantánea con una red de fabricantes y transportis- tas interconectados e incluso, para completar este círculo virtuoso, el destino final del dispositivo, como un centro de recuperación certificado para reciclar los componentes. Se puede imaginar utilizar un teléfono para escanear un código de barras 2D, colocado en el producto para enviar automáticamente un mensajero a su puerta para recoger- lo, con instrucciones precisas sobre su envío final. Una visión expansiva de la sostenibilidad En esta cadena de un futuro cercano como es 2033, la sostenibilidad será fundamental. Uno de los mayores expertos del mundo en cadena de suministro, el Dr. Edgar Blanco del MIT, ha manifestado: «Se nos ha dado muy bien hacerle llegar los envíos que nos ha pedido; pero lo que no se nos ha dado tan bien ha sido recuperar esos envíos que le hicimos llegar. Es necesario intentar extraer más valor, bien en los materiales recuperables o reciclables o bien entregando los mismos productos a otras personas una vez que el primer destinatario ya no los necesite». Se trata sin duda de una visión expansiva. La industria del transporte lleva tiempo a la vanguar- dia de la sostenibilidad, con esfuerzos constantes para reducir su huella de carbono y crear una cadena de sumi- nistro cada vez más respetuosa con el medioambiente. Este compromiso se mantendrá e incluso algún día podría integrarse en todo el ciclo de vida de un producto. La cadena de suministro actual ha evolucionado muchísimo desde el carro tirado por una mula para llegar al mercado, y aún le queda un buen camino por recorrer hasta llegar a los envíos por el ciberespacio. Pero inclu- so en tan solo 20 años, la cadena de suministro del futuro estará mucho más pulida y será mucho más accesi- ble, fiable, sostenible y rentable que nunca. Una noticia excelente para la economía global de la que tanto dependemos todos. La autopista de la economía mundial jamás había sido tan buena como lo es hoy en día. Pero lo mejor de todo es que aún está en construcción. Craig Simon, Presidente y CEO de Supply Chain de FedEx PERFIL 25 manutencion & almacenaje 491 Opnión