AECOC firma un acuerdo con la Federación Española del Banco de Alimentos Durante el acto protocolario de adhesión de las 100 primeras empresas a la campaña “La alimentación no tiene desperdicio, aprovéchala”, Aecoc y a la Federación Española del Banco de Alimentos, FESBAL, firmaron un acuerdo de colaboración para optimizar e incrementar la redistribución de cualquier alimento apto para el consumo. De hecho incluye tres principios básicos: profesionalizar el proceso de captación y gestión del producto alimentario en los Bancos de Alimentos; establecer sistemas de medición que contribuyan a delimitar en cifras el impacto de la campaña, para, finalmente incrementar el volumen de alimentos entregados a los bancos de alimentos. Durante la firma del acuerdo, José Antonio Busto, recordó que sobre los 54 Bancos de Alimentos pende la amenaza de la Unión Europea de reducir las ayudas que reciben en 2014, lo que supondrá que dejaremos desatendidas a 300.000 personas. Por este motivo, destacó el “empeño” de los Bancos de Alimentos desde su creación en la lucha contra el hambre y el despilfarro. para que se optimice la llegada al consumidor final. La iniciativa, presentada en un acto público en noviembre en Madrid y ante la presencia del responsable del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, intenta dar respuesta a una realidad marcada por unas ci- fras, cuando menos preocupantes, y que necesitan de una actuación urgente. Y es que, según los datos ofrecidos por Aecoc, un tercio de los alimentos producidos en el mundo para consumo humano se pierden o desperdician anual- mente. En concreto, según la FAO anualmente son más de 1.300 millones de toneladas de alimen- tos los que no llegan al consumi- dor final. Se trata de un problema global que afecta tanto a países industrializados (670 millones de TN) como en los que se encuen- tran en vías de desarrollo. Toneladas de alimentos a la basura Por lo que se refiere al desperdicio de alimentos, siempre según la FAO, el problema es mayor en los países in- dustrializados, que arrojan alimen- tos perfectamente comestibles a la basura. Así, los consumidores de los países ricos desperdician la misma cantidad de alimentos (222 millones de toneladas) que la totalidad de la producción alimentaria neta del África Subsahariana (230 millones de toneladas). La situación en el continente europeo, no es mucho mejor ya que la Comisión Europea ha ci- frado en 89 millones de toneladas la cantidad anual que se desper- dicia en el conjunto de la Unión, cantidad que implica un desper- dicio anual per cápita valorado en 250 euros. En línea con el resto del continente europeo, en España se desperdicia una gran cantidad de alimentos y en todos los ámbitos. En el caso del hogar, el desper- dicio total anual alcanza más de 2,9 millones de toneladas; en las empresas de producción, 39% del total desperdiciado; en le canal horeca (14%) y un 5% durante la distribución de los diferentes alimentos. Una situación que el presi- dente de la asociación, Francisco Javier Campo, considera que se debe solucionar cuanto antes, es un problema de gran complejidad v que afecta a todos los eslabo- nes de la cadena alimentaria, incluidos los consumidores y que, curiosamente, no ha disminuido, al contrario, se ha incrementado con la crisis económica. En ese entorno, la iniciativa iniciada por Aecoc, y a la que ya se han añadido con compa- ñías del nivel del de Stef-TFE, Coca-Cola, Nestlé, Campofrío, Nutrexpa, El Árbol, Mercadona, Dia, El Pozo, Mahou-San Miguel o Grupo Siro, así como el conjunto de asociaciones profesionales que las representan intentarán poner un poco de “luz”, en una situación que para muchos ya ha sido calificada de dramática, no olvidemos, que según datos de Cáritas, en España existen nueve millones de personas en situación de pobreza, puntualizó Francisco Javier Campo. También es un problema logístico El éxito de la iniciativa, además de la implicación de todos los ámbitos de la sociedad: empre- sas, asociaciones, Administración y público en general, dependerá en gran medida de una correcta realización de la logística que implica la manipulación, trans- porte y distribución de alimentos perecederos. En este aspecto, una excelente forma de reducir el des- perdicio es logrando que los 54 Bancos de Alimentos que actual- mente existen en el país incre- menten el número de alimentos que reparten anualmente, cifrado en la actualidad en 104 millones de kilos, y que estos lleguen en condiciones de ser consumidos por los receptores. Se trata, como explicó el presidente de Aecoc, de distri- buir más y mejor, hemos des- cubierto dificultades a la hora de enviar los alimentos que los centros de distribución quieren hacer llegar a las organizaciones sociales, bancos de alimentos, 27 manutencion & almacenaje 483-84 Jornadas