El Museo de la Rioja gana espacio con una entreplanta de Tecro La necesidad de multiplicar el espacio llevó al Museo de la Rioja a instalar una entreplanta segura y efectiva. El equipamiento y el montaje son clave para lograr el éxito en un edificio singular en el que se debe trabajar entre piezas irrepetibles. El museo de La Rioja se encuentra actualmente en pleno proceso de re- forma y ampliación para lograr optimizar el espacio dedicado al depósito de su fondo patrimonial con un mejor aprovecha- miento del volumen de sus almacenes auxiliares externos. Con este objetivo, en una nave en la que ya se contaba con estanterías para carga paletizada y móviles de carga manual, Tecro, uno de los más reconocidos fabricantes en España de entreplantas modulares por su efectivi- dad y seguridad, realizó un proyecto en el que la ubicación de entreplantas ha permitido un mayor aprovechamiento del espacio. En el caso del Museo de La Rioja, se ha instalado una entreplanta de doble altura, destinada al almacenaje pesado de cargas de 800 Kg/m2, y con unas dimensiones de 18x6 m, a 3’5 m y 2’43 m de altura total. Diferentes soluciones para aprovechar el espacio En esta entreplanta, se han conjugado diferentes soluciones de Tecro como las dos variantes del espacio elevado (todas ellas en perfiles ligeros confor- mados en frío). La planta superior está formada por un forjado con canto de 300 mm, más el tablero estructural y la planta inferior con un canto de vigas y correas de 200 mm, más tablero estruc- tural. Como accesorios de interés por su contribución al aprovechamiento del espacio que es el objetivo prin- cipal, cabe destacar la incorporación de lámparas Tecro, homologadas para instalación entre correas, sin tornillos, que ofrecen una óptima iluminación sin restar altura. Un montaje crítico para piezas delicadas Uno de los puntos más críticos del proyecto fue la disposición de los pilares ya que su posición estaba condicionada por los archivos móviles existentes. Por ello, se debieron realizar diversas uniones entre vigas maestras, vuelos del forjado, etc., además de la necesidad de repartir la carga en la base de los pilares por medio de perfiles laminados en caliente, debido a la resistencia límite de la solera existente. Otro aspecto delicado fue el mon- taje, ya que se debía realizar en medio de una multitud de objetos del museo como vasijas, pergaminos, útiles de labranza, etc., y de estanterías y ar- chivos móviles. Sin embargo, dada la ligereza y versatilidad de los perfiles junto a un equipo técnico preparado, el montaje se realizó a mano en un tiempo récord. El resultado es una instalación útil, segura y que aporta el museo esos metros tan necesarios, para el almacenaje. m&a Un edificio de 1752 Tecro realiza exhaustivos estudios del comportamiento mecánico de sus entreplantas desmontables basados en la normativa Código Técnico de la Edificación (CTE). En el Palacio de Espartero en Logroño, un edificio de 1752, que había sido adquirido por el Estado en 1884 para habilitarlo como Palacio Episcopal, se encuentra actualmente el Museo de La Rioja. La casa Palacio de Baldomero Espartero nunca fue utilizada como sede episcopal, aunque protagonizó diferentes usos hasta que fue declarada monumento histórico artístico en 1962. En diciembre de 1971, se decide instalar el museo de La Rioja donde se exponen pinturas y esculturas de los siglos XII al XIX, piezas arqueológicas y arte contemporáneo. 69 Soluciones