54 mento. Además, los programas para realizar simulaciones de consumo posibilitan estable- cer previsiones sobre emisiones de gases de efecto invernadero y su eventual reducción. La nave logística sostenible: un camino sin retorno En la construcción de las nuevas plataformas logísticas se pone así el acento en la importan- cia de la eficiencia energética y la construc- ción sostenible. En este sentido, Gustavo Cardozo, Vicepre- sidente primero de ProLogis España, señala que podríamos decir que una nave logística sostenible es aquella que cuenta con un dise- "En Gazeley hemos podido experimentar estos ahorros en proyectos desarrollados para Eroski (San Agustín de Guadalix- Madrid) y Carrefour (Begonte-Lugo), donde reaprovechando el calor generado para la producción de frío y utilizando técnicas de ultima generación en la producción de frío, conseguimos ahorros energéticos importantes". Óscar Heras, Director Técnico de Gazeley ño, elementos constructivos y ubicación que permitealusuario,enprimerlugar, beneficiar- se de ahorros y mejorar la eficiencia económica de su operativa por el hecho de minimizar sus consumos energéticos y contar con la máxima funcionalidad del espacio, con el menor im- pacto medioambiental posible, tanto en la fase constructiva como de uso y generando bienes- tar social a su entorno. En definitiva, para que una nave logística pueda ser sostenible debe ofrecer ventajas y mejoras no solo desde el punto de vista medioambiental, sino económi- ca y socialmente. Por su parte, Óscar Heras, Director técnico de Gazeley, añade, una nave logística sosteni- ble se diferencia de una nave convencional, por la incorporación de soluciones constructivas y equipamientos técnicos que permite realizar un menor consumo energético durante la ex- plotación del edificio, así como en la construc- ción del mismo y en el futuro una vez acabada su vida útil, teniendo en cuenta la proceden- cia, naturaleza de los materiales y su posterior reciclaje. La sostenibilidad como concepto vinculado a la reducción de emisión de gases de efecto invernadero y optimización del consumo de energía de los edificios e instalaciones logís- ticas puede decirse que ha iniciado un cami- no sin retorno en su extensión, en la medida que los agentes comprometidos en el sector logístico, usuarios, como promotores y cons- tructores, han asumido la sostenibilidad como uno de los elementos básicos de su actividad. La importancia que tiene ya, y mayor que va a tener, la sostenibilidad en la construcción de los edificios logísticos, –reconoce Óscar Heras– viene dada principalmente por el de- seo y necesidad de los usuarios de operar un edificio con bajos costes de operatividad, pero también por una verdadera concienciación de los grandes grupos industriales, promotores y constructores, hacia lo que es el futuro de nuestra sociedad en cuanto a racionalización "A título general podríamos afirmar que un edificio dotado de medidas completas de ahorro energético podría estar ahorrando en torno a un 25% o un 35% de consumo energético, como en los edificios promovidos por Gazeley en Alovera (Guadalajara) para DHL y CEVA en Ontigola ( Toledo)". Óscar Heras. Director Técnico de Gazeley Costes y retorno de la inversión en eficiencia energética • Coste de la nave logística sostenible respecto a la convencional. Dadas las circunstancias actuales y las restricciones financieras de cara a los nuevos proyectos, la cuestión del coste de la nave logística sostenible, respecto a la convencional cobra una especial relevancia. • Óscar Heras, Director Técnico de Gazeley, habitualmente el mayor coste de inversión suele estar en la construcción, pero también hay medidas en este aspecto que no suponen grandes desembolsos como son un correcto diseño de aislamientos, orientación del edificio, etc. En cuanto a la tecnología de gestión, con una inversión más moderada podemos ahorrar mucho en consumo, porque además de racionalizar el consumo, nos enseña y educa a explotar un edificio de una forma más eficiente en cuanto a consumos se refiere. • Gustavo Cardozo, Vicepresidente Primero de ProLogis, coincide en la misma apreciación; definitivamente la construcción absorbe la mayor carga de costes. Pero es bueno aclarar que muchas veces utilizando los mismos materiales o equipos de uso convencional y sin tener grandes sobrecostes, podemos alcanzar una mayor eficiencia de los edificios, si sabemos utilizarlos correctamente. Nosotros, en muchos casos, al diseñar un edificio tomamos en cuenta muchos factores externos y propios del lugar de implantación del mismo, como las temperaturas medias anuales, altitud, radiación solar, vientos predominantes, datos pluviométricos, etc., para que incidan favorablemente, se aprovechen en muchos casos y ofrezcan su máxima aportación a la mejora de la eficiencia energética y en la reducción del impacto medioambiental durante la vida útil de ese edificio. • Retorno de la inversión. G. Cardozo: podríamos decir que es el mismo, ya que el coste adicional que supone construir una nave de esta tipología se imputa proporcionalmente a la renta que se cobra al usuario, sabiendo éste de antemano que los ahorros de los que termina beneficiándose son mayores que el diferencial de renta que paga. • O. Heras: dependiendo de las tecnologías, podemos estar en torno a unos 5 años para sistemas de iluminación de alta eficiencia y bajo consumo, 12-15 años en una instalación fotovoltaica de producción de electricidad, y unos 15-20 años para un sistema de reciclaje de aguas pluviales. En otras medidas como incremento de aislamientos y eficiencia en la gestión de residuos, es más difícil estimar un periodo de retorno, pero los beneficios para el gasto económico y medioambiental también son elevados. LOGÍSTICA DE BAJO CONSUMO Escáner